Son 1.992 los kilómetros que separan a Buenos Aires de Río de Janeiro, ciudad que será escenario del debut de la Selección Argentina en el Mundial de Brasil el 15 de junio ante Bosnia. Hoy un vuelo a ese destino tiene un costo de 5.000 pesos. Viajar en junio ya costará cerca de 9.000. Pero ese es un dato menor en comparación con los paquetes que se ofrecen para presenciar los partidos del equipo de Sabella. Como mínimo hay que desembolsar 40.000 pesos por persona. A esta altura ir al Mundial es para muchos un sueño difícil de alcanzar.

Desde el momento en que se conoció que Brasil sería sede de la Copa del Mundo gran parte de los argentinos se ilusionaron con la posibilidad de ver semejante evento en persona. El entusiasmo creció cuando se develaron las ciudades en las que jugará nuestra Selección. Sin embargo las distancias físicas dejaron de tener una relación coherente con los precios y el objetivo quedó lejos del alcance de la gran mayoría.

En las agencias de turismo de Paraná hay varias opciones disponibles. Los paquetes varían de acuerdo a la forma de traslado, la cantidad de días de alojamiento y el número de partidos a presenciar: va entre 40.000 y 150.000 pesos por persona.

“Desde hace algunos días hay paquetes concretos para poder ofrecer. En este caso se ofrecen unas entradas especiales, que son tipo palcos. Si bien son caras es la única alternativa que tenemos las agencias de viajes para ofrecer un paquete completo con entradas incluidas y garantizadas desde acá”, subrayó Franco Estamatti.

En el detalle, agregó: “Son cuatro programas que salieron a la venta. El primero es de tres noches, otro de siete, uno de nueve y otro de 13”.

En cuanto a la última opción Estamatti señaló que “incluye los tres partidos de primera ronda (contra Bosnia en Río de Janeiro, con Irán en Belo Horizonte y contra Nigeria en Porto Alegre), pasajes de avión, 13 noches de hotel, desayunos, traslados de hoteles hasta los estadios, un kit de merchandising, y las entradas premiere. Ese paquete de 13 días está a 150.000 pesos por persona”.

En tanto el de tres noches en Río de Janeiro para presenciar el partido debut de la Selección cuesta unos 40.000 pesos.

Las agencias locales coinciden en afirmar que por el momento este tipo de paquetes no han encontrado compradores: “Hubo consultas pero no muchas. Los programas demoraron en llegar y ahora con los precios resulta difícil vender alguno. Además la modalidad de venta de entradas (por sorteo en la página de FIFA) generó otro tipo de problemas”, señaló Adolfo Quiroga.

La diferencia es notable respecto de experiencias anteriores: “En otras ocasiones ya contábamos con opciones de paquetes con un año de anticipación. Para Sudáfrica por ejemplo ofrecimos programas de 10.000 dólares para tres partidos. Hoy ir a Brasil cuesta unos 7.000 dólares por un partido”, detalló Quiroga.

La alternativa más económica (pero para quienes ya cuentan con entradas) es con traslado en colectivo: “Tenemos un paquete de 11 noches con pasajes en micro desde Buenos Aires, alojamiento en Buzios, Iguazú y Porto Alegre y traslados a los estadios de los tres partidos de Argentina en la fase de grupos. Eso tiene un valor de 27.000 pesos aproximadamente pero no se incluyen las entradas”, explicó Norberto Fernández.

Según Fernández los altos costos en un mundial no son novedad: “Históricamente ha sido caro ir a un evento de este tipo. Quizás por ser en Brasil muchos esperaban que sea más barato, pero realmente es mucha la plata que se necesita para poder ir”.

Mediante el mecanismo dispuesto por la FIFA para adquirir los tickets queda una chance. El 15 de abril se abrirá la última fase de venta. Seguramente los más fanáticos se jugarán para achicar costos y hacer de este mundial un sueño más cercano a la realidad.