Arsenal de Sarandí.
Sigue con vida en la Copa Libertadores.
Arsenal le ganó anoche 1-0 al Zamora venezolano en el Estadio La Carolina, en Barinas, y todavía sueña con la pequeña posibilidad que le queda de acceder a los octavos de final de la Copa Libertadores de América.
El gol lo consiguió Juan Pablo Caffa, de penal, a los 29 minutos del primer tiempo.
Con este resultado en el partido correspondiente al Grupo 4, el equipo de Gustavo Alfaro se ubica un punto por debajo de la línea del escolta Boca Juniors, pero los xeneizes visitarán este miércoles al Fluminense, en Río de Janeiro.
En la última fecha Arsenal será anfitrión del Flu y Boca le abrirá las puertas de La Bombonera al Zamora.
El entrenador argentino Gustavo Alfaro, consciente de la escasa chance que le queda a su equipo de obtener el boleto deseado en el ámbito internacional, recurrió a una formación bastante alternativa, puesto que a esta altura de la temporada, y con los resultados en la mano, le dio prioridad a la competencia doméstica.
De todos modos, a este conjunto del Viaducto le alcanzó para imponerse ante el Zamora en la casa de los venezolanos, algo de lo que se vio privado en su momento el poderoso Boca, que demasiado ruido provocó cuando empató 0-0, a tal punto que hasta puso en riesgo la continuidad del director técnico Julio Falcioni.
Pero aquella tormenta de verano pasó para Boca y hoy el plantel conducido por el Emperador lidera el torneo Clausura y se perfila como el escolta del Flu en este grupo copero.
Claro que Arsenal, con modestia, pero también con hombría, se jugó en procura de sostener su esperanza y corrió mucho en este escenario del Estado de Barinas, en el noroeste venezolano.
El premio al esfuerzo Arsenal lo consiguió por un ingenuo penal que causó Dollbys Rodríguez, ya que la pelota le picó mal y se valió de un brazo para controlarla.
Ese regalo lo valoró Caffa, quien tiró con eficacia a la izquierda del arquero Alvaro Forero, quien se arrojó hacia el otro lado.
En la segunda parte Arsenal, respaldado por su arquero y capitán Cristian Campestrini, se ocupó fundamentalmente de defender su ventaja en el tanteador y le facilitó la tarea el local con sus limitaciones a la hora de generar juego y atacar.
Cuando se le presentó la ocasión el elenco de Sarandí se valió de alguna réplica aislada y por esa vía hasta pudo haber aumentado la distancia.