La Iglesia advierte sobre "el agobio del desencanto" y "las promesas incumplidas"
Además del pronunciamiento, los obispos argentinos decidieron, como un hecho concreto, que en todas las diócesis del país se visiten los barrios populares.
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La Conferencia Episcopal Argentina (CEA) advirtió este miércoles sobre el "agobio del desencanto", las "promesas incumplidas" y "la falta de un horizonte claro" en el país, en un mensaje difundido con motivo de cumplirse en diciembre los 40 años de la recuperación democrática, y pidió a la clase dirigente "propuestas concretas y realistas más que soluciones tan seductoras como inconsistentes", de cara a las elecciones presidenciales de este año.
El mensaje, titulado "A 40 años de la recuperación de la democracia renovamos la esperanza", fue difundido este miércoles en el tercer día de deliberaciones de la asamblea plenaria del Episcopado, reunido en la Casa de Retiros "El Cenáculo" de la localidad de Pilar, encabezados por su titular, el obispo de San Isidro, monseñor Oscar Ojea.
Además del pronunciamiento, los obispos argentinos decidieron, como un hecho concreto, que en todas las diócesis del país se visiten los barrios populares: "Como pequeño gesto hemos decidido que todas las diócesis del país hagamos una misión visitando algunos de nuestros barrios donde viven los más vulnerables y abandonados", anunciaron.
El mensaje episcopal comienza diciendo: "Hermanas y hermanos de nuestra querida patria, día tras día vemos un pueblo que sufre. Pesa el agobio del desencanto, las promesas incumplidas, los sueños rotos. Pesa también la falta de un horizonte claro para nuestros hijos. Angustia sentir que es cada vez más difícil poner el pan en la mesa, cuidar la salud, imaginar un futuro para los jóvenes. Se suman el miedo a salir a la calle, la violencia y la agresión generalizada. Se hace sentir cada vez más la pérdida de los valores que sostenían la vida familiar y social".
A continuación, los obispos expresaron que les "duele en el alma la deserción de los chicos del colegio, las aulas reemplazadas por una esquina o un rincón peligroso a la vista de madres impotentes. Volvemos a olvidar que la mejor política de seguridad es la educación".
"No pretendemos ser expertos en diagnósticos, sólo recogemos el lamento y las lágrimas de la gente que nos encontramos en nuestros pueblos y barrios. ¿Qué hicimos de nuestra patria? A cuarenta años de la recuperación de la democracia vemos con dolor cuánto desaprovechamos las posibilidades que teníamos de construir una Argentina pujante y feliz", agregaron los prelados.
En ese sentido, afirmaron que "la bronca y el cansancio no son buenos consejeros", e invitaron "con fervor a seguir confiando en el camino democrático con la esperanza de que estamos a tiempo".
"Siempre es posible renacer si lo hacemos entre todos. Siempre hay camino si somos capaces de conversar y de ponernos la patria al hombro. Este es un deseo que no sabe de grietas o partidos, es de un pueblo", dice el mensaje.
En otro tramo, los obispos argentinos solicitan a "quienes poseen mayores responsabilidades que tengan la grandeza de pensar en el sufrimiento de muchos, más que en los intereses mezquinos".
"La gente necesita recibir propuestas concretas y realistas más que soluciones tan seductoras como inconsistentes. También espera que se sienten a escucharse y a discutir con respeto hasta encontrar puntos en común. Ansía caminar hacia un proyecto estratégico de desarrollo, que abra un horizonte de esperanza, dignidad, paz social, trabajo y prosperidad, privilegiando a los tirados al borde del camino", dicen en un mensaje, de cara a las elecciones nacionales de este año.
Luego, citan al papa Francisco: "Por otro lado, de ésta no zafa nadie. Dice Francisco: Seamos parte activa en la rehabilitación y auxilio de las sociedades heridas…Es posible empezar de abajo y de a uno, pugnar por lo más concreto y local hasta el último rincón de la patria…".
"Nos inspiran muchos que ya lo están haciendo. Como hermanos y conciudadanos queremos invitarlos e invitarnos a cultivar los grandes valores de la honestidad, la laboriosidad, el respeto, el cuidado de la vida, la bondad, el servicio, la justicia. Sin ellos no habrá políticas ni proyectos que nos saquen del pozo. También la actividad política debería estar cimentada en una vida austera y coherente", reflexionaron los preados..
Para finalizar, expresaron que, como creyentes, proponen "un camino desde la fe. El Dios que nos dio la vida y nos quiere tanto puede darnos la fuerza para no bajar los brazos y seguir luchando. Porque si no actuamos hoy, dejaremos de ser protagonistas para convertirnos en espectadores fracasados".
La asamblea plenaria de obispos comenzó el lunes y se extenderá hasta el viernes en Pilar, con la participación de los 97 obispos de todo el país, a los que se suman como invitados 41 obispos eméritos, 1 obispo electo y el nuncio apostólico Miroslaw Adamczyk.
En la primera jornada, Ojea se refirió a la publicación de la obra "La verdad los hará libres", sobre documentación desclasificada del Vaticano y el Episcopado que confirma el rol de la institución durante la dictadura.
El obispo dijo que "la publicación de La verdad los hará libres fue un verdadero ejercicio de escucha de nuestros archivos y de las víctimas que estaban detrás de ellos. No tuvimos como Episcopado sólo la intención de publicar los textos de nuestros archivos, sino la de hacernos cargo de una historia, haciendo en primer lugar una memoria agradecida por tantas hermanas y hermanos nuestros, laicos, religiosos, sacerdotes y obispos que en momentos dramáticos de nuestra historia respondieron con enorme coraje evangélico y entregando sus vidas".
Ojea estuvo acompañado en la comisión ejecutiva de la CEA por monseñor Marcelo Daniel Colombo, arzobispo de Mendoza y vicepresidente primero; monseñor Carlos Alfonso Azpiroz Costa, arzobispo de Bahía Blanca y vicepresidente segundo; y monseñor Alberto Germán Bochatey, obispo auxiliar de La Plata y secretario general del organismo eclesial.
La Conferencia Episcopal Argentina (CEA) advirtió este miércoles sobre el "agobio del desencanto", las "promesas incumplidas" y "la falta de un horizonte claro" en el país, en un mensaje difundido con motivo de cumplirse en diciembre los 40 años de la recuperación democrática, y pidió a la clase dirigente "propuestas concretas y realistas más que soluciones tan seductoras como inconsistentes", de cara a las elecciones presidenciales de este año.
El mensaje, titulado "A 40 años de la recuperación de la democracia renovamos la esperanza", fue difundido este miércoles en el tercer día de deliberaciones de la asamblea plenaria del Episcopado, reunido en la Casa de Retiros "El Cenáculo" de la localidad de Pilar, encabezados por su titular, el obispo de San Isidro, monseñor Oscar Ojea.
Además del pronunciamiento, los obispos argentinos decidieron, como un hecho concreto, que en todas las diócesis del país se visiten los barrios populares: "Como pequeño gesto hemos decidido que todas las diócesis del país hagamos una misión visitando algunos de nuestros barrios donde viven los más vulnerables y abandonados", anunciaron.
Los obispos expresaron: "duele en el alma la deserción de los chicos del colegio, las aulas reemplazadas por una esquina o un rincón peligroso a la vista de madres impotentes. Volvemos a olvidar que la mejor política de seguridad es la educación"
El mensaje episcopal comienza diciendo: "Hermanas y hermanos de nuestra querida patria, día tras día vemos un pueblo que sufre. Pesa el agobio del desencanto, las promesas incumplidas, los sueños rotos. Pesa también la falta de un horizonte claro para nuestros hijos. Angustia sentir que es cada vez más difícil poner el pan en la mesa, cuidar la salud, imaginar un futuro para los jóvenes. Se suman el miedo a salir a la calle, la violencia y la agresión generalizada. Se hace sentir cada vez más la pérdida de los valores que sostenían la vida familiar y social".
A continuación, los obispos expresaron que les "duele en el alma la deserción de los chicos del colegio, las aulas reemplazadas por una esquina o un rincón peligroso a la vista de madres impotentes. Volvemos a olvidar que la mejor política de seguridad es la educación".
"No pretendemos ser expertos en diagnósticos, sólo recogemos el lamento y las lágrimas de la gente que nos encontramos en nuestros pueblos y barrios. ¿Qué hicimos de nuestra patria? A cuarenta años de la recuperación de la democracia vemos con dolor cuánto desaprovechamos las posibilidades que teníamos de construir una Argentina pujante y feliz", agregaron los prelados.
En ese sentido, afirmaron que "la bronca y el cansancio no son buenos consejeros", e invitaron "con fervor a seguir confiando en el camino democrático con la esperanza de que estamos a tiempo".
"Seamos parte activa en la rehabilitación y auxilio de las sociedades heridas…Es posible empezar de abajo y de a uno, pugnar por lo más concreto y local hasta el último rincón de la patria" Papa Francisco-citado por los obispos
"Siempre es posible renacer si lo hacemos entre todos. Siempre hay camino si somos capaces de conversar y de ponernos la patria al hombro. Este es un deseo que no sabe de grietas o partidos, es de un pueblo", dice el mensaje.
En otro tramo, los obispos argentinos solicitan a "quienes poseen mayores responsabilidades que tengan la grandeza de pensar en el sufrimiento de muchos, más que en los intereses mezquinos".
"La gente necesita recibir propuestas concretas y realistas más que soluciones tan seductoras como inconsistentes. También espera que se sienten a escucharse y a discutir con respeto hasta encontrar puntos en común. Ansía caminar hacia un proyecto estratégico de desarrollo, que abra un horizonte de esperanza, dignidad, paz social, trabajo y prosperidad, privilegiando a los tirados al borde del camino", dicen en un mensaje, de cara a las elecciones nacionales de este año.
Luego, citan al papa Francisco: "Por otro lado, de ésta no zafa nadie. Dice Francisco: Seamos parte activa en la rehabilitación y auxilio de las sociedades heridas…Es posible empezar de abajo y de a uno, pugnar por lo más concreto y local hasta el último rincón de la patria…".
El mensaje, titulado "A 40 años de la recuperación de la democracia renovamos la esperanza", fue difundido este miércoles en el tercer día de deliberaciones de la asamblea plenaria del Episcopado, reunido en la Casa de Retiros "El Cenáculo" de la localidad de Pilar
"Nos inspiran muchos que ya lo están haciendo. Como hermanos y conciudadanos queremos invitarlos e invitarnos a cultivar los grandes valores de la honestidad, la laboriosidad, el respeto, el cuidado de la vida, la bondad, el servicio, la justicia. Sin ellos no habrá políticas ni proyectos que nos saquen del pozo. También la actividad política debería estar cimentada en una vida austera y coherente", reflexionaron los preados..
Para finalizar, expresaron que, como creyentes, proponen "un camino desde la fe. El Dios que nos dio la vida y nos quiere tanto puede darnos la fuerza para no bajar los brazos y seguir luchando. Porque si no actuamos hoy, dejaremos de ser protagonistas para convertirnos en espectadores fracasados".
La asamblea plenaria de obispos comenzó el lunes y se extenderá hasta el viernes en Pilar, con la participación de los 97 obispos de todo el país, a los que se suman como invitados 41 obispos eméritos, 1 obispo electo y el nuncio apostólico Miroslaw Adamczyk.
"La publicación de La verdad los hará libres fue un verdadero ejercicio de escucha de nuestros archivos y de las víctimas que estaban detrás de ellos. No tuvimos como Episcopado sólo la intención de publicar los textos de nuestros archivos, sino la de hacernos cargo de una historia"Monseñor Oscar Ojea
En la primera jornada, Ojea se refirió a la publicación de la obra "La verdad los hará libres", sobre documentación desclasificada del Vaticano y el Episcopado que confirma el rol de la institución durante la dictadura.
El obispo dijo que "la publicación de La verdad los hará libres fue un verdadero ejercicio de escucha de nuestros archivos y de las víctimas que estaban detrás de ellos. No tuvimos como Episcopado sólo la intención de publicar los textos de nuestros archivos, sino la de hacernos cargo de una historia, haciendo en primer lugar una memoria agradecida por tantas hermanas y hermanos nuestros, laicos, religiosos, sacerdotes y obispos que en momentos dramáticos de nuestra historia respondieron con enorme coraje evangélico y entregando sus vidas".
Ojea estuvo acompañado en la comisión ejecutiva de la CEA por monseñor Marcelo Daniel Colombo, arzobispo de Mendoza y vicepresidente primero; monseñor Carlos Alfonso Azpiroz Costa, arzobispo de Bahía Blanca y vicepresidente segundo; y monseñor Alberto Germán Bochatey, obispo auxiliar de La Plata y secretario general del organismo eclesial.