Por primera vez, después de sortear varios inconvenientes, el Tren de los Pueblos Libres cumplió con el trayecto Pilar-Paso de los Toros, en el centro de la República Oriental del Uruguay. En esta etapa de prueba, partió a las 8 del viernes y regresó a nuestro país el sábado por la madrugada.
El viaje se realizó en el marco del cronograma de pruebas y arribó al vecino país con diez pasajeros a bordo. El actual esquema de pruebas buscará llegar al verano con un servicio diario entre la localidad bonaerense y la uruguaya, pasando por Concordia.
Quizás sea por el nombre del servicio o quizás porque la destrucción de los trenes fue algo tan característico del menemismo, el hecho es que el paso del tren viene imbuido de cierta épica. Así lo demuestran los entrerrianos que salen con banderas argentinas y uruguayas a saludar a la formación, ilustrada con gigantografías de paisajes de los dos países. Pero también es el caso de Humberto y Marcela, que se hicieron unas minivacaciones a las Termas de Salto. Marcela es docente universitaria y Humberto trabaja en Obras Públicas.
Pero no es sólo por fervor integracionista que 48 pasajeros se tomaron el tren, que por el momento tiene una frecuencia semanal. El viaje parte a las 8 del viernes y regresa en la madrugada del martes.
Norberto, por ejemplo, tiene 66 años y va a Concordia a visitar a su hija, casada con un uruguayo. El pasaje le costó 80 pesos con descuento por jubilado y en ómnibus le cuesta 155. De hecho, tres cuartas partes del pasaje descendió en alguna de las ciudades entrerrianas (Basavilbaso, Villaguay, Concordia) lo que da una pauta de la enorme necesidad de regularizar el tren al litoral.
Ya se había hecho un intento con el Gran Capitán, el tren semanal que parte de Chacarita y llega a Misiones. “La ventaja de este servicio respecto del Gran Capitán es que, además de que se va a llegar a un tren diario, los coches vagones son mucho más cómodos”, dice Daniel Lamastra, jefe de opeaciones de TBA que funciona como encargado de las pruebas del Tren de los Pueblos Libres. Los coches fueron comprados recientemente en Holanda y llaman la atención por su andar silencioso, publicó Tiempo Argentino.
“Después de tantos años de inactividad, hay que tener en cuenta muchas cosas -dice Lamastra- y por eso, después de hacer varias pruebas con el coche vacío hacemos pruebas semanales para ir viendo las necesidades que tiene el público”. De este viaje inaugural, Lamastra anotó varias cuestiones a conversar. El horario, por ejemplo, debe ser eficiente para quienes quieren tomarse un fin de semana.