Días atrás trascendió que una joven de 17 años fue hallada aparentemente dopada, con lesiones y presuntamente abusada sexualmente, luego de las serenatas estudiantiles que se realizan en la ciudad de Concepción del Uruguay. Los fuertes rumores llegaron a los medios de prensa locales, pero desde las autoridades policiales y la Fiscalía en turno se informó que no existía denuncia. No obstante esto, los trascendidos siguieron su curso y hasta salió a la luz el nombre de la presunta víctima del ataque sexual y la versión de que la Policía habría negado la posibilidad de que la madre de la joven hubiera radicado la denuncia en la comisaría. Esto llevó a la fuerza policial a enviar un comunicado desmintiendo tal versión, lo que luego terminó de aclararse cuando la madre de la muchacha pidió dialogar para que se sepa de una vez por todas la verdad de los hechos.
La mujer, “E”, para evitar dar a conocer identidades que pudieran perjudicar más aún a la joven– contó que su hija verdaderamente tiene una conducta excelente. Buena estudiante y trabajadora, a la que destacó como una “muy buena hija”.
“Quise hablar con ustedes para tratar de aclarar esto de una vez por todas. Con lo que pasó perjudican a mi hija gratuitamente y la escrachan delante de todos. Esa noche mi hija estuvo con su novio hasta las 22.30 y después se quedó en la casa de su prima a esperar a sus amigas. Alrededor de las 23.30 llegaron las chicas y se fueron a las serenatas. Ella se acuerda que alrededor de las 2.30 llevaron a una de las amigas a la casa que vive en inmediaciones de la estación y volvieron a la serenata hasta las 5 o 6 de la mañana, que se fue con otras tres chicas en el auto de un chico, de quienes no me acuerdo los nombres. Cuando una de las chicas se bajó en el 144 Viviendas, ella también se bajó y les dijo que vivía por la zona, lo que no era cierto. Hasta ese momento se acuerda de todo, pero a las 7 de la mañana supuestamente la mujer encargada de Mi Casita abrió la puerta y la encontró adentro, por lo que llamó a la Policía. Yo creo que la mujer la encontró en la puerta y la entró porque le dio lástima, pero al ver que no reaccionaba se asustó y dijo que la encontró adentro”, explicó “E”.
La madre de la muchacha destacó además que su hija no presentaba lesiones en la cara como se dijo, ya que sólo tenía barro y estaba sucia en sus ropas, asegurando que no fue abusada sexualmente como se dio a conocer, lo que fue confirmado por un ginecólogo particular al que ella llevó personalmente ante la duda de lo sucedido.

Se despertó y se fue
Con su ojos enrojecidos por la emoción, “E” explicó que en ese momento su hija reaccionó y se encontró con todos. “Le preguntaron su nombre, les respondió bien y mientras ellos revisaban el lugar por el cual pudo entrar, se levantó y se fue caminando hasta tomar un remís para ir a su casa. Al llegar no recordaba nada de lo que había pasado en ese lapso de tiempo y no tenía lesiones. La llevé al hospital, pero me explicaron que para hacerla ver tenía que haber una denuncia y nosotros no la hicimos porque ella no sabía qué le había pasado”, relató la madre.
Tratando de encontrar una explicación al lapso en que no recuerda nada, “E” dijo: “Ella asegura que algo le pueden haber dado en la bebida y reconoció haber tomado, pero no sabe en qué momento se lo pudieron haber suministrado. Mi hija me dijo que muchas veces tomó en sus salidas, pero jamás le pasó algo así y que lo último que tomó fue vino con hielo en un vaso grande. Mi hija jamás toma lo que le convidan, pero seguro se lo pusieron en un momento de distracción”, contó la dolorida madre, que no dudó en resaltar las cualidades de la adolescente.

La supuesta denuncia
Otro punto dudoso que trascendió fue la supuesta negativa de la Policía para tomar la denuncia, a lo que la mujer destacó que nunca dijo eso a nadie.
“Yo vine para desmentir eso. Quiero dejar en claro que me atendieron bien y que me explicaron todo lo que debíamos hacer. Mi hija me dijo que estaba bien y que no tenía síntomas de haber sido abusada por eso no hicimos denuncia y si no hay denuncia, el médico forense no la revisaba. Por eso la llevé primero al ginecólogo en forma particular. Ni siquiera había vestigios en sus ropas. Doy gracias a Dios que no le pasó nada cuando deambuló por esa zona y espero que todo quede aclarado”, finalizó la mujer.
Por su parte desde la Policía, ante las versiones que se generaran oportunamente, se señaló que se investigaba el caso, pero hasta el momento no hay elementos que permitan confirmar si a la muchacha se le suministró alguna sustancia.