La mujer que fuera detenida en San José, acusada de amordazar y maniatar a una nena de sólo cinco años en el patio de su casa, fue dejada en libertad tras audiencia en las Sala Penal de la Cámara de Apelaciones de Concepción del Uruguay. Se trata de Mariana Aguirre de 24 años, joven que fuera detenida en 6 de octubre del corriente, en una vivienda del barrio San Bernardo, donde tenía a la menor atada con una soga y amordazada con un cardo en la boca para que no gritara. El hecho, que demandó un importante despliegue policial a partir de la denuncia de vecinos, causó estupor en la comunidad al trascender las características del insólito suceso.

La causa recayó en la fiscalía del doctor Juan Malvasio quien dispuso la detención de la joven Aguirre, durante 20 días, lo que fue aceptado en principio por el juez de Garantías Mariano Miño, con el objetivo de continuar las diligencias investigativas. Los testigos habrían recibido amenazas, mientras la madrastra de la nena estaba en la cárcel de Paraná. Ante esta situación la Fiscalía, solicitó al juez que se extendida el plazo de detención por 20 días más para impedir que esta influyera en los testigos, lo que fue denegado.

Ante esta medida, el fiscal apeló y la audiencia se llevó a cabo este jueves ante la vocal Marta Cristina Bonifacino, estando presente en representación del fiscal, el doctor Juan Carlos Benítez, fiscal Auxiliar y la doctora Susana Charreun en representación del Ministerio Pupilar, oficiando como defensora oficial, la doctora Alejandrina Herrero.

La audiencia

Durante la audiencia se escucharon los argumentos de la Fiscalía y el Ministerio Pupilar, que señalaban la gravedad del suceso, considerando el caso como aberrante, señalando que la niña –hija de la pareja de la acusada– era maltratada y fue hallada atada en el patio, desnuda, con una mordaza que sujetaba un cardo a la boca de manera de impedir que gritara, con signos de debilidad y hasta la pérdida del cabello por el estrés, coincidiendo ambos en la necesidad de que se prorrogue la detención de la acusada.

Por su parte, la defensa hizo su descargo destacando que no había peligro de entorpecimiento en la investigación o posibilidades de fuga de Aguirre, ya que ella tiene dos pequeños hijos de 18 meses y dos años y medio, considerando que si escapara el perjuicio sería mucho más grave que el encierro.

Tras las presentaciones de las partes, la vocal Bonifacino hizo un análisis de las posturas, considerando que la prisión preventiva produce efectos indeseables que a veces son contrarios al fin que se propone. Por otra parte, la vocal se basó en el principio de la inocencia y destacó que toda persona debe permanecer en libertad mientras dure el proceso siempre y cuando no se esté ante la posibilidad de entorpecimientos o fuga, por lo que no hizo lugar a la apelación de la Fiscalía, que se reservó el derecho de presentarse en casación, para reclamar la detención de la acusada de privación ilegítima de la libertad, abandono de persona y lesiones.