Una noche de hace siete años una delegación policial retiró de un prostíbulo a dos mujeres, quienes denunciaron haber sido llevadas allí por la fuerza. Hoy los dos regentes del local son acusados de Promoción de la prostitución, ya que la Ley nacional de Trata de Personas fue sancionada cuatro años después. La Fiscalía pidió que sean condenados, mientras que los defensores de ambos solicitaron la absolución por falta de pruebas.
Ayer a la mañana comenzó el juicio a puertas cerradas contra Raúl Izaguirre, oriundo de Sauce de Luna, y Gustavo Fabián Wagner, de Bovril, en la causa iniciada en 2004. El 12 de diciembre de ese año efectivos policiales fueron al prostíbulo de Paraná Campaña, de donde retiraron a dos mujeres, una menor y otra mayor de edad, que aparentemente ejercían la prostitución.
Según denunciaron las mujeres en su declaración, los acusados les dijeron que las iban a llevar a pasear y que mediante ese engaño las trasladaron a dicha “whiskería”. Allí las incitaron a prostituirse, en contra de su voluntad. Un año después se realizó un allanamiento al prostíbulo en busca de pruebas que refuercen la acusación.
Luego de ser procesados, y de varias idas y vuelta de la causa durante estos siete años y dos meses, ayer se realizó el debate, donde pasaron ante el tribunal testigos y se realizaron los alegatos.
La representante del Ministerio Público Fiscal, Carolina Castagno, consideró que estaba probado el delito cometido por Wagner e Izaguirre, por lo que pidió condenar a 10 meses de prisión efectiva al primero y a 10 años al segundo, quien ya cumple una condena por un asesinato.
Por su parte, tanto el defensor oficial de Wagner, Juan Alberto Silva Velazco, como el de Izaguirre, Díaz Vélez, pidieron la absolución de los coimputados, por la ausencia de pruebas contundentes para determinar la autoría del hecho. Fundamentalmente, los abogados sostuvieron que la acusación se basó únicamente en la versión que las víctimas manifestaron en la denuncia. Además, cuestionaron el trabajo durante la investigación de la causa, ya que no se realizó el reconocimiento en rueda de ninguno de sus defendidos. En este sentido, se mencionó que cuando se recuperó a una de las mujeres del prostíbulo, no se realizó ningún acta del procedimiento; y que el allanamiento al local se haya realizado recién un año después del rescate de las dos mujeres, el 14 de diciembre de 2005.
También consideraron que no se probó que hayan existido las condiciones para determinar que hubo prostitución, según lo establece la Ley, como la habitualidad.
Se espera la sentencia que el tribunal de la Sala 2 de la Cámara del Crimen dará a conocer, por un caso que demoró mucho tiempo en esclarecerse en un juicio oral.

De la radio a la cárcel
Uno de los dos acusados de promover la prostitución de dos mujeres recibió una condena a prisión perpetua por el asesinato de un hombre en Sauce de Luna. Se trata de Raúl Izaguirre, alias Tizingo, quien cumpliendo esta pena se fugó de la Unidad Penal Nº 4 de Concepción del Uruguay en 2008 y un tiempo antes de la de Gualeguaychú. El reo, como en las películas, limó los barrotes de una reja. Varios meses después fue ubicado en Mercedes, Corrientes, donde se había cambiado su identidad, por el de Lautaro Molina. Además, Tizingo conducía un programa de radio en una FM. Lo hizo hasta que el 25 de setiembre de 2008 un operativo relámpago interrumpió la programación y detuvo al prófugo.