Lanús, que acumulaba una racha de cuatro derrotas consecutivas, consiguió ayer su primera victoria en el grupo 2 de la Copa Libertadores de América, al vencer como local a Emelec de Ecuador por 1 a 0, en un cotejo de la tercera fecha.
El único tanto del partido fue convertido por el delantero Mariano Pavone, a los 27 minutos de la segunda etapa, mientras que el defensor ecuatoriano José Luis Quiñónez fue expulsado a los 36 de la primera parte.
Con este resultado, Lanús acumula 4 puntos en tres presentaciones, las mismas que Flamengo de Brasil, que tiene un partido menos jugado.
Por su parte, Olimpia de Paraguay suma 3 unidades en dos presentaciones y Emelec la misma cantidad de puntos, pero en tres cotejos.
Lanús, que acumulaba una racha de cuatro derrotas consecutivas (tres por el torneo local y una en la Copa) llegó a este cotejo urgido de una victoria para no sumar otra frustración en un torneo internacional. Y lo consiguió con merecimiento.
Desde el minuto inicial, el equipo dirigido por Gabriel Schurrer fue muy superior a los ecuatorianos, que no ganaron nunca en tierra argentina y hoy llegaron al estadio en distintos remises, porque el ómnibus que los trasladaba se rompió a un kilómetro de la denominada Fortaleza granate.
Tanto fue Lanús que a los 27’ de la parte final consiguió su premio, tras un centro de Valeri y la definición de Pavone por sobre el cuerpo de Dreer (ex Arsenal de Sarandí