Un hombre apreciado y respetado del barrio Nueva Ciudad fue víctima de un asalto y una puñalada, que determinó que debiera ser internado. Los vecinos al ver que el septuagenario era atacado salieron a defenderlo y tras acorralar al delincuente pretendieron lincharlo, sin llegar a matarlo porque la Policía se los sacó de las manos.
El hecho ocurrió en la tarde del lunes en el interior del barrio ubicado en la zona norte de Paraná. Se informó que Jorge Sánchez se encontraba en la puerta de su casa cuando fue sorprendido por Alberto Tonarelli, de 21 años, quien desde hacía pocas semanas había ido a vivir a la zona.
El hombre, de 72 años, se habría resistido al asalto y la respuesta del joven fue golpearlo con un palo en la cabeza y luego apuñalarlo en dos oportunidades en la zona abdominal.
Se destacó que el acusado habría intentado tomar un dinero del septuagenario, pero no pudo porque los vecinos intentaron hacer justicia por mano propia.
Tonarelli vio que unas 20 personas se le fueron encima, algunos lo comenzaron a patear y golpear con lo que pudieron y otros buscaron una soga que fue colocada en su cuello. Así lo arrastraron por el camino de tierra y cuando preparaban “colgarlo” de un árbol pudo sacarse la atadura y correr hacia el campo.
La persecución de los vecinos siguió, y por eso es que rodearon el santuario del Gauchito Gil en el Acceso Norte de Paraná.
El acusado, asustado, pudo decir que iba a ingresar a rezar, cuando en verdad quiso esconderse.
Hubo algunos momentos de tensión porque los vecinos del barrio querían prender fuego el precario lugar con el sospechoso.
Los responsables del lugar de veneración al Gauchito Gil aclararon a la turba enardecida que no pretendían ayudar al delincuente, pero no estaban dispuestos a que les destrozaran el santuario. Esto fue aprovechado por Tonarelli, que salió corriendo hacia la zona del barrio José Hernández.
No pudo recluirse en otra vivienda porque fue apresado por los perseguidores, que nuevamente le propinaron una severa paliza e intentaron ahorcarlo. Bien maltrecho estaba cuando personal de la comisaría 14ª llegó al lugar y con bastante esfuerzo pudo rescatarlo.
El joven, oriundo del barrio Pancho Ramírez, estaba ensangrentado, cortado por todos lados, con fracturas en brazos y piernas y con un estado de shock importante porque vio que la muerte estuvo cerca de tomarlo.
Con rapidez fue llevado al hospital San Martín, donde los médicos lograron estabilizarlo, curarlo y dejarlo internado por algunas horas, hasta que se le informó al juez de Instrucción Mauricio Mayer que estaba en condiciones de ser llevado a la Alcaidía de Tribunales. Allí fue alojado, con las numerosas contusiones a la espera de ser notificado de su situación procesal.
En tanto, desde la División Homicidios, a cargo del comisario Ángel Ricle, se informó que el detenido está procesado y excarcelado, luego de que en febrero pagara la fianza en la causa que lo acusó de ser el responsable del homicidio de Federico Robles, de 18 años, acontecido el 28 de diciembre de 2012 en el Pancho Ramírez. Además, está sospechado de ser el responsable de un asalto ocurrido en La Paz.