Ocurrió alrededor de las 10.30, en el inmueble ubicado en calle Tibiletti, entre San Martín y Alberdi, a poco más de 70 metros de la Delegación de la Policía Federal y a cuatro cuadras de la Jefatura.

Fuentes señalaron que los ladrones habrían llegado en un Citroën C4 color gris metalizado, descendiendo frente al domicilio de Ismael Blanc, de unos 55 años. Bien vestidos con sacos y corbatas, los ladrones llamaron a la puerta sin despertar sospechas de vecinos y transeúntes que a esa hora suelen pasar por el lugar tan transitado.

El dueño de casa abrió y atendió a los visitantes, que al ingresar a la vivienda, lo amenazaron y tras golpearlo en la boca, lo maniataron de pies y manos, para así llevarse una importante suma de dinero que, trascendió, rodaría los 10 mil dólares.

Tras esto, los ladrones escaparon en el auto, pero nadie se dio cuenta de lo sucedido, hasta que el damnificado logró salir a la calle, donde fue visto por vecinos que le quitaron las ligaduras, para dar aviso a la Policía, que inmediatamente estuvo en el lugar, ya que recorrían zonas céntricas de la ciudad.

Pese a esto y a haberse irradiado un pedido de colaboración a comisarías y filiales vecinas, hasta el momento no surgieron novedades.

Minutos más tarde, se hicieron presentes efectivos de la División Investigaciones, autoridades de la Departamental, personal de Criminalística y el mismo fiscal de turno, el doctor Pablo Bur, quien constató las acciones de la Policía en el lugar del hecho, ante la presencia de testigos civiles.

Respecto a lo sucedido, se presume que los autores tenían conocimiento de la existencia de dinero en el lugar y que podrían haber actuado con un tercer hombre de apoyo.