El seleccionado argentino de básquetbol perdió con México en una de las semifinales del Fiba Américas y no pudo llegar a la definición del certamen que se disputa en Caracas, Venezuela. Los Tricolores se impusieron por 76 a 70 en el estadio Poliedro y avanzaron a la final tras un juego muy equilibrado. El conjunto dirigido por Julio Lamas alternó el dominio del marcador, pero la buena defensa rival, sumado a los errores propios y el protagonismo decisivo de Gustavo Ayón, inclinaron la balanza para los aztecas. Luis Scola fue la figura Albiceleste con 18 puntos, ocho rebotes y cinco asistencias, mientras que Facundo Campazzo y Selen Safar lo secundaron en el goleo con 14 y 11 unidades, respectivamente. Este miércoles los dirigidos por Julio Lamas jugarán por el tercer puesto ante el perdedor de la llave que sostendrán Puerto Rico y República Dominicana. Más allá de la derrota el objetivo principal ya estaba cumplido para el Alma Argentina: la clasificación al Mundial de España 2014.
Sin la presión de ganar por una clasificación, se esperaba que el juego de la primera semifinal del Premundial entre Argentina y México se destacara por mayor sensación de libertad en los jugadores, pero lejos se estuvo de eso, sobre todo del lado Albiceleste.

Los sudamericanos empezaron torcidos adelante, en parte por la buena defensa de México sobre Scola (y Luis tirando con bajos porcentajes), y en parte por la gran cantidad de pérdidas (cuatro en los primeros cinco minutos).

México, otra vez con Hernández aprovechando su versatilidad para sacar a Scola lejos del cesto y amenazar con su tiro, o penetrar, más un Ayón activo, sacó ocho rápido (16-8) pero no parecía que pudiera mantenerse esa línea mucho tiempo.

Cuando Argentina puso a Boccia y Laprovíttola en el segundo cuarto, estando abajo 24-17, cambió el juego. Adrián le dio una gran agresividad defensiva, Nico entró derecho y ambos, sumados a cinco triples repartidos entre Lapro, Safar y Scola, le permitieron subir de golpe al ataque, para meter un parcial de 15-0 y pasar al frente 32-24.

Allí salió Scola, México se dio cuenta que tenía que cambiar algo (6m40s sin anotar) y, aprovechando un par de malas decisiones argentinas, puso un 9-0 que le volvió a dar el liderazgo (34-33) pero una técnica a Stoll puso otra vez en las manos Albicelestes la posibilidad de anotar desde la línea y cortar la sequía. El segundo cuarto, excelente desde lo defensivo, y también en ataque, quedó 37-33 para los criollos.

La defensa siguió a alto nivel en el tercer cuarto, controlando a Ayón, pero aunque Argentina sacó siete (42-35), cometió una seguidilla de errores infantiles, por malos pases básicamente, que México aprovechó con corridas y juego veloz (Harris, Alonzo), para poner un 9-0 que le dio el liderazgo nuevamente.

El partido se complicaba y entonces sacó la cara Campazzo. El petiso tuvo cuatro minutos tremendos. Triple primero, doble después con una penetración potente. Después robó un balón y sacó falta. Y más tarde robó otro balón que sí terminó en bandeja.

Argentina controlaba el juego sin sacar grandes diferencias, complicado por lo que hacía Harris en ofensiva, muy movedizo y difícil para Safar. Podía tirarle, o penetrarle, y en la última opción metió varios puntos importantes. Por eso Argentina no sacó una enorme diferencia, pero se fue al último descanso con una renta de cinco: 58-53.

Luego de colocarse 62-55, parecía que Argentina podía quebrarlo, pero ocurrió todo lo contrario. No pudo mantener la intensidad defensiva en la pintura tras la cuarta de Pipa Gutiérrez, se quedó sin gol y México, con velocidad y forzando en la zona interior con Ayón y Mata, pasó adelante 66-64 con un parcial de 13-6.

El apresuramiento del equipo argentino produjo que México aproveche ciertos errores nacionales. Posteriormente a ello, la defensa impuesta por el combinado de Valdeolmillos se plantó fuertemente en cancha y complicó el accionar de El Alma en ataque. Sin embargo, Argentina se las rebuscó y logró mantenerse siempre en partido, sin perderle pisada al rival.

El bloque defensivo que impusieron los aztecas en los minutos finales, y la enorme tarea de Ayón fueron claves para que México se mantenga al frente y corte las chances de Argentina a la hora de encarar hacia el aro.

Este último punto se respaldó en tres jugadas marradas por los de Lamas: un intento de triple de Safar que fue taponado por Hernández, un mal pase de Campazzo ante una defensa cerrada y un intento de triple de Scola que no llegó a buen puerto.

Además de esto, México logró sacar al Pipa Gutiérrez de la cancha por acumulación de infracciones. Panorama más que complicado para un rival que empezó a definirlo poco a poco desde la línea de libres.

El planteo ordenado de los mexicanos en ningún momento se alteró y así los de Valdeolmillos terminaron por propinarle una derrota a Argentina de 76-70. El elenco Albiceleste jugará desde este miércoles por el tercer puesto ante el perdedor de Puerto Rico y República Dominicana.