Hace unos días cerca de la localidad de Viale, un grupo de personas se encontraron con una yarará de aproximadamente 4 metros. La yarará tiene una coloración castaño claro a oscuro y las adultas alcanzan una longitud desde 0,70 a 1,5 metros. Los dibujos en el cuerpo colaboran con la identificación. No todas son venenosas.

Además, una vecina de El Ramblón comentó que se sorprendió cuando encontró una yarará de 1,20 mts. en el patio de su casa.

El aumento de reportes y las noticias referidas al tema dan cuenta de un aumento de casos en zonas cercanas a las ciudades y semiurbanas. No es que la cantidad de yararás haya aumentado, sino que la expansión de las ciudades ocupa los espacios naturales de estos animales.

Los ataques a las personas se dan por lo general cuando la víbora se siente amenazada o acorralada, aunque no lo esté realmente, por eso hay casos en donde el espacio es abierto e igual aparecen con agresividad.