Desde ese momento dicha Cruz viene recorriendo de mano en mano toda la República Argentina.
En San José, la Cruz de San Damián visitará a partir de la hora 12, instituciones de la localidad.
A las 14 llegará a la Capilla San Tarsiscio. Allí se concentrarán los feligreses de Colón, Villa Elisa, Ubajay, Pueblo Liebig, El Colorado, Santa Teresita, San Bernardo, San José y colonias aledañas para luego misionar en barrio El Brillante.
A las 17:15 se trasladará en procesión hasta la Capilla San Miguel donde se celebrará la Santa Misa.
“La idea es que pueda ser vista por la mayor cantidad de vecinos para que todos tengan la posibilidad de acercarse, conocerla, y presentarle sus intensiones. A las 19:30 será expuesta en la Parroquia para que puedan adorarla. Cabe recordar que en la misa con los argentinos el Papa Francisco dijo tres frases: que hagamos lío, que cuiden los extremos y que no licuen la fe”, indicaron los organizadores a "San José Web".
Historia de la Cruz de San Damián
San Francisco de Asís, cuando se paseaba junto a la iglesia de San Damián, (que se encontraba en ruinas) percibió en espíritu que le decían que entrara a orar en ella. Luego que entró, se puso a orar fervorosamente ante una imagen del Crucificado, que piadosa y benignamente le habló así: “Francisco, ¿no ves que mi casa se derrumba? Anda, pues, y repárala”. Y él, con gran temblor y estupor, contestó: “De muy buena gana lo haré, Señor”. Entendió que se le hablaba de aquella iglesia de San Damián, que, por su vetusta antigüedad, amenazaba inminente ruina. Con estas palabras fue lleno de tan gran gozo e iluminado de tanta claridad, que sintió realmente en su alma que había sido Cristo crucificado el que le había hablado. Vuelto en sí, se dispuso a obedecer, y concentró todo su esfuerzo en la decisión de reparar materialmente la iglesia.
Una vez reparada la estructura, entendió que la misión que Jesús le encomendó era la Iglesia de los fieles, la que tenía que levantar.