El primer paso no fue el ideal, el que se esperaba. No solo por el resultado adverso, sino por la actuación del equipo. Fue pobre y con problemas que deberá corregir en la inmediatez, si bien esta historia es larga y recién empieza.
Es cierto que es difícil jugar bien en el debut. Casi siempre se intenta hacer lo mejor posible como para ganar y arrancar con una sonrisa. No obstante, anoche Sionista tuvo una presentación de escaso nivel. Jugó mal colectivamente y tampoco contó con rendimientos individuales como para subrayar.
Tuvo un aceptable primer tiempo, pero después se cayó a pedazos en el complemento. No entendió como funcionar, le costó muchísimo poder convertir y atrás tuvo problemas para frenar el mano a mano. Entonces, sus argumentos fueron débiles y no estuvo a la altura de la circunstancia.
Estudiantes fue más. Ganó justificadamente a partir de un trabajo colectivo más preciso que el de su adversario. La diferencia entre ambos es que la visita se cayó al pozo, supo salir y quedar bien plantado. Sionista no. Cuando se fue a la banquina ya nunca más pudo volver a la ruta. Forzó mucho y eligió mal los caminos.
Fue 71 a 62 para Estudiantes, que otra vez pisó fuerte en Paraná y se dio el gran gusto. El Verde arrancó bien, con victoria en casa ajena y dejando un buena impresión. Sionista fue lo contrario. Perdió en su cancha y su estreno no fue el pretendido. El sábado los dos se vuelven a ver las caras. Será otra historia.
ACTIVOS. Los dos entraron con ganas de demostrar, de jugar. Se notó en la intensidad y en la agresividad con que ambos quisieron imponer respeto. Fue más que entretenido el juego, no por la claridad y el buen básquet, si por la entrega, las ganas y el sacrificio.
El primer tramo fue parejo y equilibrado, de hecho los dos se prestaron el comando del resultado. Arrancó mejor Estudiantes, corrigió Sionista y después fue todo palo y palo.
El local intercambió buenos pasajes con apresuradas tomas de decisiones. Más que nada ocurrió en ofensiva, sector donde no siempre logró lastimar con precisión.
Quedó claro que la primera opción fue hacer llegar el balón a la zona pintada, donde Román González y Darren Phillip fueron argumentos interesantes como para llegar al aro contrario. Los dos fueron inteligentes para postearse y desnivelar.
A su vez, fue bueno lo de Marcos Saglietti, siempre atento y bien predispuesto para correr. Así, entre algunas buenas y otras no tanto, el juego no tuvo un claro dueño y cerró los primeros 10 minutos 18 iguales.
ALGO MEJOR. Fue bueno el arranque de Sionista en el segundo cuarto. Un par de agresivas defensas le permitió tomar la lanza para correr y llegar en transición. Y cuando no lo pudo lograr, el juego estático estuvo bien seleccionado. En ese sentido, el ingreso de Juan Cantero sirvió para ser más balanceado. Fue así que el dueño de casa encontró el camino correcto y por eso sacó la primera diferencia. Fue de 34 a 25 ante un Estudiantes perdido.
Los de Sebastián Svetliza siguieron machacando con el pase interior. Phillip y González no defraudaron. Sionista terminó el primer tiempo con 36 puntos, de los cuales 22 tantos lo convirtieron los pivots (14 el extranjero y 8 el Chuso).
El error del local fue no saber conservar la diferencia. La visita corrigió sobre la marcha y al menos pudo cerrar más cerca la primera mitad (36-32).
SE CAYÓ. La evolución de estudiantes se dio con la involución de Sionista. La visita levantó y el local perdió criterio. Así arrancó el complemento. Fue una continuidad del cierre de la etapa anterior.
El dueño de casa quiso volver a mandar en el trámite pero equivocó la manera. Se apresuró, forzó situaciones y complicó el panorama.
Lo argumentos anteriores (bola adentro para Pittman o González, o campo abierto para Saglietti) dejaron de ser opciones claras. Estudiantes acentuó la marca sobre los tres y su estrategia surtió efecto.
Sionista convirtió 4 puntos en 4 minutos. Lo malo no fue solo la poca cantidad, sino la forma en cómo quiso convertir. Fue todo muy sucio y con poca eficacia.
El Verde jugó mejor, tomó confianza y agarró el volante del partido. Los de Concordia pasaron a ganar 51 a 46 y al ratito 54 a 46. En este tercer chico los de Laginestra metieron un parcial de 22 a 10 y se acomodaron mejor.
MÁS PROBLEMAS. Sionista entró a la recta final no solo con la presión de estar abajo 54 a 46, sino también con la obligación de mejorar ostensiblemente. Con el ánimo golpeado, el local salió con la idea de cambiarle el ritmo al partido. El DT Svetliza mandó a marcar zona 2-3. Quiso sorprender pero no lo logró. Un triple de Gamboa fue una piña fuerte al mentón. Estudiantes sacó mayor diferencias, 59 a 48.
Los problemas para tener opciones claras y anotar seguido no se diluyeron para el local, de hecho en el segundo tiempo anotó 15 tantos en 15 minutos.
Con Ferreira y García, Estudiantes no detuvo su marcha y comprometió aún más el presente de su rival (63 a 51 a 3 minutos).
Muchas pérdidas, malos tiros y mala selección de lanzamiento llevaron a Sionista a un panorama sin margen de error. Con poco tiempo y mucha desventaja Sionista salió a presionar para buscar la reacción. Se puso 68 a 62, pero no fue suficiente como para dar vuelta la historia.
SIONISTA
SIONISTA 62
Sandrini 2
Saglietti 15
Pittman 6
Phillip 20
González 10
Cantero 5
Uranga 2
Melo 2
DT: S. Svetliza
ESTUDIANTES 71
Ferreira 15
Gamboa 9
García 21
Giorgi 8
Zago 9
Zilli 9
Stival 0
DT: H. Laginestra