La Cámara Nacional Electoral (CNE) se reunirá con los jefes de campaña de los candidatos presidenciales el próximo jueves, cuatro días antes de las elecciones para elegir al sucesor de Cristina Fernández de Kirchner, según dijeron ayer fuentes electorales. La idea es repasar todas las medidas tomadas en las últimas semanas para garantizar la transparencia del acto electoral. Pero según las fuentes habrá también otro eje: evitar que el domingo a la noche se instalen ganadores y/o sospechas de fraude ante los resultados del escrutinio provisorio.Las encuestas indican un estrecho margen para saber con antelación si alguno de los candidatos puede ganar en la primera vuelta -el mejor posicionado sería el gobernador bonaerense, Daniel Scioli- o si no consigue la ventaja necesaria para evitar ir a un balotaje, previsto para el 22 de noviembre.
El estrecho margen por el que podría definirse la elección en la primera vuelta no sólo es la preocupación de los candidatos y los partidos o frentes que los acompañan sino que también existe en la Justicia, por el escaso tiempo entre la primera vuelta y la eventual segunda y la necesidad de tener el resultado del escrutinio definitivo lo más pronto posible.
El escrutinio provisorio está a cargo del Poder Ejecutivo Nacional, a través del Ministerio de Justicia y la Dirección Nacional Electoral, que utilizan al Correo Argentino y contrataron a la empresa española Indra para el procesamiento de los datos. Desde el Gobierno ya adelantaron que los resultados provisorios se conocerán más rápido que en las primarias del 9 de agosto por la reducción de boletas y candidatos.
Pero el resultado que vale es el del escrutinio definitivo. Y ese, según la ley, está a cargo de la Justicia. Esa idea le recordarán los miembros de la Cámara Nacional Electoral a los jefes de campaña y a los apoderados de los partidos políticos o agrupaciones que competirán el próximo domingo 25. Y allí prometerán realizarlo lo más rápido posible, según dijeron las fuentes.
Los magistrados mantuvieron en las últimas semanas diversas reuniones que luego plasmaron en acordadas y decisiones a su alcance con el fin de garantizar la transparencia del comicio. La última de ellas fue la autorización a los partidos a designar fiscales por distrito, partido o comuna con el fin de “optimizar las tareas de fiscalización de los partidos políticos”, que el Código Electoral pone en manos de ellos.
Pero una de las decisiones más importantes fue adoptada en una acordada firmada esa misma semana y que atiende a otro de los reclamos plasmados por los apoderados y representantes de los partidos que el mes pasado se reunieron con los jueces del tribunal.
Esto tiene que ver con la unificación del formato de las actas y certificado de escrutinio y el telegrama que se escanea desde los distintos centros instalados por todo el país y se transmite al centro de cómputos del Correo, en el barrio de Barracas.
El escrutinio provisorio de las elecciones Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) cerró al mediodía del 10 de agosto con el 97% de las mesas contadas porque había un 3 por ciento con irregularidades de todo tipo, principalmente actas ilegibles o confusas.
La movida de la Cámara Electoral para garantizar la transparencia electoral fue consecuencia de los comicios provinciales cuestionados durante este año, especialmente el de Tucumán, donde el Acuerdo por el Bicentenario, liderado por el radical José Cano, todavía pone en duda el resultado y pretende discutirlo en la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
La Cámara Electoral impulsa una reforma del sistema para luego de estos comicios. En ese sentido recibió el respaldo de la Corte, instó a los poderes Ejecutivo y Legislativo a modificar las cosas a su alcance y llevó a cabo una serie de reuniones para incluir modificaciones que estuvieran dentro de su órbita para las presidenciales del domingo 25 y la eventual segunda vuelta del mes que viene.
El tribunal se reunió con representantes de ONGS, los apoderados partidarios, representantes de la oposición y de todos los partidos, el Comando Electoral, la Prefectura y las fuerzas de seguridad fronterizas, los jueces y secretarios electorales de todo el país, el Correo y la Dirección Nacional Electoral.
De esos encuentros surgieron iniciativas tales como una mayor participación de los fiscales partidarios (ahora podrán estar, por ejemplo, en los lugares desde los que se transmiten los telegramas al Correo y tendrán más presencia en las escuelas), mayor provisión de boletas para combatir el tradicional robo de las mismas, la posibilidad de utilizar un cuarto oscuro complementario con más papeletas, la publicación en tiempo real en internet de los telegramas escaneados y una carga no direccionada de la información a medida que lleguen los resultados.