Gimnasia y Esgrima sufrió ayer, en el Núñez, la tercera derrota consecutiva en tres presentaciones en esta edición 2011/2012 del Torneo Argentino A. Y esta vez no fue una derrota más porque, además, en el camino quedaron dos defensores que fueron expulsados y que no podrán estar en el próximo compromiso.
Pese al mal arbitraje del bonaerense Ascenzi las razones de la derrota deben buscarse por la falta de volumen de juego que mostró el equipo de Santiago Losada que tuvo mucho la pelota, trató de manejarla con criterio pero careció de ideas para superar las dos líneas de cuatro visitante y poder llegar con peligro al arco visitante.
En el comienzo pareció que Franco Flores tenía la llave para abrir el cerrojo de los visitantes apoyados en una gran trabajo de Gonzalo Gho y de defensores que no tenían ningún prejuicio en tirarla lejos.
Pero Flores estaba muy sólo porque Matías García no aparecía en el partido y Henry no hacía pesar su habilidad por la izquierda.
Y si a Gimnasia le costaba una eternidad llegar hasta la valla defendida por Gerardo Fibiger a la visita no le interesaba demasiado salvo las corridas que, por izquierda, mostraba Ferrara. Así dadas las cosas el período se iba en un bostezo cuando llegaron las jugadas más importantes del partido. Primero lo tuvo Gimnasia ante un preciso centro de Henry que Tonelotto no pudo cabecear bien pero que igual superó al uno visitante. Draghi salvó en la línea.
En la contra Ferrara, esta vez por derecha, creó una enorme jugada para superar a Guiffrey y Zabaleta y definir cruzado ante el achique de Kloster. Demasiado premio para un equipo que, en ataque, había ofrecido muy poco, casi nada.