El hallazgo de un cráneo humano que aún tendría materia orgánica en descomposición, dejó pasmados a los vecinos de la localidad de San Benito ayer en horas de la tarde.
Algunos apenas habían dejado atrás la siesta, cuando escucharon el griterío de los gurises que señalaban a un perro que mordisqueaba algo que, cuando se acercaron, los sorprendió.
Fue en calle Antelo, a metros de ruta 18, en Barrio San Sebastián.
Tras la llegada al lugar, del juez de Instrucción, Carlos Ríos, tomó intervención personal de la División Homicidios, cuyos detectives sondearon la situación y pudieron averiguar que unos niños divisaron, aproximadamente a las 16, a un perro con un cráneo que aún conservaba restos de material orgánico y dieron aviso de la situación.
El hecho alarmó al vecindario que dio inmediata advertencia a la policía.
Humano. En diálogo el jefe de la División Homicidios, Ángel Ricle manifestó: “puedo confirmar que se trata de un cráneo de origen humano y que tiene aún material orgánico que va a ser analizado, aunque a primera vista, el medico forense puede estimar que podría tener una antigüedad de aproximadamente 30 días”, adelantó.
Los habitantes de San Benito recordaron que a principios de noviembre desapareció un hombre en esa localidad y que hasta hoy no se lo ha vuelto a ver, por lo que los investigadores también van a sondear la posibilidad de que se trate de esta persona.
“Nosotros rastreamos en todas las inmediaciones, pero no se encontró nada mas que pueda relacionarse con el hallazgo del cráneo”, dijo Ricle.
En la zona de calle Antelo también se mencionaba que el perro que halló el cráneo es un Boxer que no suele alejarse más de una cuadra de la casa de su dueño, por lo que consideran que no lo pudo haber traído desde muy lejos.
Desaparecido. En referencia a que existe una persona desaparecida desde principios del mes de noviembre, se trata de Roque Pedro Domingo Pisech, de 45 años, quien falta de su domicilio desde el 5 de noviembre.
Su casa quedó abierta, según dijo en aquel momento a los medios periodísticos una prima hermana, que pidió a quienes conozcan y lo vean, que aporten datos.
Pisech se ausentó repentinamente hace casi un mes de su casa de San Benito, ubicada en calle Garabaso, y desde entonces la familia no ha podido dar con su paradero. “Los vecinos lo vieron salir, pero después ya no se lo vio más. La casa estaba abierta y han desaparecido cosas”, aseguró una prima hermana del hombre.
En aquel momento dijo que “hay comentarios de que podría estar muerto en Villa Urquiza o en San Benito, o estar con los gitanos, pero ellos dicen que no”, señaló la mujer, quien indicó que se comunicaron telefónicamente con vecinos de Sauce Pintos, adonde iba asiduamente, pero les aseguraron que tampoco estuvo allí.
Pisech no tiene antecedentes penales, y en el marco familiar se descartó que haya sido atacado por un algún “ajuste de cuentas” o que decidiera desaparecer por sus propios medios o motivos personales