Villa Urquiza sufre como cada verano otra vez la falta de agua potable. Concordia y La Paz declararon la emergencia hídrica. Sufren baja presión zonas de Concepción del Uruguay, Victoria, Paraná y Colón.
La persistencia de las altas temperaturas puso al límite los sistemas operativos de potabilización de distintas localidades entrerrianas. El consumo en niveles récord lleva a la imposibilidad de mantener esa inédita demanda durante varios días. Aunque las situaciones de cada ciudad varían. Por ejemplo, Villa Urquiza sufre como cada verano otra vez la falta de agua potable. La rotura de una bomba para extraer el agua y la falta de habilitación de un nuevo pozo puso otra vez en crisis al servicio. La localidad, que vive una gran temporada por la afluencia de turistas, padece desde el fin de semana la falta de servicio de agua potable.
La situación no es nueva: desde hace dos veranos se proyectan obras para ampliar la capacidad de potabilización y distribución. Desde el municipio se destacó ayer, en forma escueta, que se trabaja en la reparación del sistema averiado, y que durante esta semana podrían comenzar a registrarse mejoras en el abastecimiento del suministro. Mientras tanto, una de las afectadas contó que “faltó inversión desde el invierno”, cuando se rompió una de las bombas que extraen el agua de los pozos. “La temporada turística en la Villa se adelantó hacia fines de noviembre, por la demanda de los turistas. Sin embargo no se tuvo en cuenta esa vital prestación”, reflexionó. La vecina, a cargo de hospedajes en la localidad, citó que todos los complejos tienen escasa presión del suministro, algo que también se padece en las inmediaciones de la plaza principal. “Sólo en la zona baja, en el balneario, hay agua durante el día. Los demás debemos esperar que carguen los tanques durante la noche, cuando a partir de las 22.30 cae el consumo en la costa. Pero no alcanza”, y planteó que algunos cuentan con tanques de reservas para evitar la falta total del suministro. La situación, según reseñó, afecta al sector comercial de la ciudad y puso en alerta a la comunidad, ante la falta de respuestas por parte de las autoridades y que afecta a la principal actividad económica.