El hijo de Angel "Baby" Etchecopar recibió el alta médica tras permanecer 16 días internado en el Hospital Central de San Isidro luego de haber sido baleado, al igual que su padre, durante un violento robo en su casa.
La directora del hospital, Susana Guidi Rojo, confirmó este miércoles que Federico Etchecopar (24) "va a tener una vida normal" y señaló que el pulmón afectado por los tiros recibidos "está evolucionando muy bien, no tiene secuelas y solamente está con kinesiología respiratoria".
Según informó Guidi Rojo a la prensa reunida frente a las puertas del hospital, Federico continuará la recuperación en su domicilio, acompañado por un "equipo interdisciplinario" de profesionales de la institución, que le harán un "seguimiento de sus heridas para realizarle curaciones".
Además, Guidi Rojo destacó que el pulmón del joven "está evolucionando bien" y que "con una contención psicológica va a tener una vida normal como cualquier chico".
Federico, quien momentos después salió del hospital sin formular declaraciones dentro de un auto con vidrios polarizados, y su padre, el conductor radial Ángel "Baby" Etchecopar, fueron heridos a balazos el 12 de marzo último al enfrentarse a tiros con tres delincuentes que entraron a robar a su casa de San Isidro.
Los asaltantes primero habían tomado como rehén al hijo del conductor y a su novia en la vía pública y luego se dirigieron con la pareja a la vivienda de Etchecopar, donde estaban su esposa Adriana y su hija embarazada María Paz (28).
Luego llegó "Baby", fue capturado y si bien la familia les entregó dinero y joyas, se produjo el tiroteo donde él y su hijo terminaron baleados, un ladrón muerto y otro herido.
Según declaró "Baby", los delincuentes amenazaron con violar a su hija y dieron la orden de matarlo porque era famoso, por lo que un ladrón le gatilló una pistola pero no salió la bala y el primero en efectuar un disparo en la habitación matrimonial fue uno de los asaltantes contra su hijo.
Durante un intenso tiroteo en el que hubo al menos 37 disparos, uno de los delincuentes murió, mientras que resultaron heridos un cómplice, Etchecopar y su hijo.
El fiscal de la causa, Andrés Zárate, determinó que Etchecopar actuó en "legítima defensa" y por ello no lo imputó ni lo indagó por el homicidio del ladrón Alejandro Morilla (24), sino que directamente le tomó declaración como víctima y testigo.
Etchecopar recibió tres disparos, fue internado en el Hospital Central de San Isidro, donde le tuvieron que reconstruir un hueso de la pierna que había sido fracturado por uno de los balazos, y fue dado de alta hace una semana, en tanto que Federico recibió cuatro disparos, uno de los cuales afectó uno de sus pulmones. Por el hecho están detenidos un menor de 17 años, y un cómplice que salió ileso de la casa de los Etchecopar identificado como Horacio Barreto (27).