Un joven acusado de homicidio se dio a la fuga mientras gozaba del arresto domiciliario, solicitado por la defensa oficial y que fuera confirmado pese la apelación de la Fiscalía, en la Cámara Penal de Concepción del Uruguay.

Se trata de Jonatas “Monito” Vallejos, de 24 años de edad, que se encontraba cumpliendo el arresto domiciliario en su casa de la localidad de “El Brillante” desde hace 60  días. Esta persona está acusado del homicidio ocurrido el jueves 9 de Febrero de 2012, del cual resultara víctima José Feliciano Martínez  “Pochina”, hecho ocurrido  frente a una whiskería de la ruta Nacional 14, a metros del acceso a San José.

Caso y proceso: Cabe recordar que el hecho ocurrió alrededor de las 5, frente a la whisquería La Dulce, luego de una discusión en el interior protagonizada entre parroquianos. Tras los incidentes en el local, un hombre de apellido Vallejos se retiró, pero momentos más tarde regresó en un evidente estado de alteración y agresividad, siguiendo con su actitud contra los presentes en el local, lo que se agravó cuando  algunos parroquianos se retiraron, ya que el hombre alterado los esperaba afuera. Cuando estos salían, este joven atacó a José Martínez (alias Pochina), a quien le disparó directamente al cuerpo con un revólver calibre 22, tras lo cual intentó hacer lo propio con otras personas, sin que salieran los tiros, escapando del lugar con una alternadora que sería su pareja, dejando abandonada su moto Yamaha. Tras lo sucedido, las diligencias policiales y judiciales el acusado fue encontrado en El Brillante, barrio donde vive, quedando detenido.

A partir de ese momento, el caso recayó en la Fiscalía a cargo del doctor Juan Malvasio y el fiscal auxiliar Sebastián Blanc, desde donde se hizo un análisis de la situación y se sostuvo que estaban dados todos los requisitos para el dictado de la prisión, ya estaba acreditada la autoría del hecho, destacándose que aun restan nuevos testimonios y medidas, entre ellas encontrar el arma usada. El fiscal consideró importante tener en cuenta que este delito tiene una pena mínima de 8 años y era probable que el acusado intentara escapar o entorpecer la investigación, lo que a su criterio “quedó demostrado con su accionar, ya que se escapó y fue encontrado por la Policía”, señaló.

La fiscalía consideraba entre otras cosas que se estaba ante un sujeto peligroso, ya que disparó a corta distancia a una persona que solo atinó a agazaparse y también intentó disparar contra otras personas. Por todo esto el fiscal pidió la prisión preventiva por 60 días, que fue rechazada en su momento por el juez de Garantías Mariano Miño a solicitud del defensor oficial, doctor Carlos Fabián Scelzi. Esto fue planteado nuevamente en audiencia de apelación ante la Cámara de Concepción del Uruguay, oficiando como juez la vocal María Cristina Calveyra, quien tarificó lo dispuesto por el juez de Garantías de la ciudad de Colón.

Malestar: La confirmación del arresto domiciliario, generó malestar en los allegados a la víctima del homicidio y fue cuestionada por la querella, a cargo del abogado Eduardo Genoud, quien sostuvo que temía por la fuga del acusado. Lamentablemente estos temores se convirtieron en realidad el miércoles  11 del corriente, cuando la Policía  de la comisaría de La Picada fue al domicilio de Vallejos y se encontró que éste se había fugado y se desconocía su paradero.

El querellante, al conocer la novedad, señaló que “Era un riesgo innecesario y probable que esto ocurriera en cualquier momento. El Código contempla medidas menos gravosas que la prisión preventiva, pero hay casos y casos, por lo que el criterio para disponer el arresto domiciliario deberá cambiarse inmediatamente en lo sucesivo”. El abogado destacó que “No existen los medios para poder controlar este tipo de medidas y ni la policía está preparada para esto y la sociedad, mucho menos”.

Ante lo ocurrido, la familia de José Feliciano Martínez, no dudo en destacar el trabajo de la Fiscalía de Colón, pero criticó el hecho de que se le negara lo solicitado con las consecuencias que esto tiene ahora. Solo resta esperar que el prófugo sea localizado y puesto a disposición de las autoridades judiciales intervinientes, que seguramente dictarán la prisión hasta que se realice la audiencia de elevación a juicio, siempre y cuando el acusado aparezca.