La investigación se inició en el barrio de Villa Adela de Concordia, donde después de un intento de robo a Omar Petellín, a fines de agosto, fue abordado e intentó ser asaltado por dos hermanos de apellido Bonzón. Los mismos al no poder lograr su cometido, prosiguieron durante casi veinte días con hostigamientos telefónicos: exigían cuantiosas sumas de dinero y hasta amenazaron de muerte a la hija del empresario.

Este miércoles se realizaron diversos procedimientos en ese barrio por orden de la fiscalía: “Se detuvo a dos hermanos que son empresarios de la madera y que en épocas anteriores tenían una relación comercial con el empaque porque tenían un aserradero y les fabricaban cajones”, explicó el Jefe Departamental de Policía de Concordia, Sergio Mendoza.

Si bien el titular de la policía local evitó dar datos filiatorios sobre los detenidos, agregó que “no se descartan más personas vinculadas a estas amenazas, por eso las investigaciones siguen su curso”. Y agregó: “Hay más personas involucradas directamente con estos dos hermanos que ahora están detenidos”.

Según la narración policial, los hechos se inician el 25 de agosto en horas del mediodía cuando Petellín se encontraba cercano al empaque en cercanías a la ruta nacional 14: “Fue sorprendido por dos masculinos, que mediante un ardid, dieron a entender que tenían problemas con un ciclomotor. Inmediatamente la victima, ante un gesto solidario, les ofreció ayuda y por eso es sorprendido de manera violenta, pistola en mano, a entregar las llaves de su camioneta”, detalló el comisario.

El robo no pudo ser concretado ya que el sobrino de Petellín que se encontraba dentro del vehículo, atinó a pedir ayuda a los trabajadores del empaque, “por lo que los delincuentes se dieron a la fuga, realizando disparos de arma de fuego, que por suerte no tuvieron generaron ninguna lesión en estas personas”, explicó.

El desafortunado hecho no terminó esa mañana, ya que los hermanos madereros se habrían propuesto como meta, hostigar telefónicamente al empresario y a su familia, exigiendo dinero y hasta propiciando amenazas de muerte. “Con el correr de los días se fueron sumando delitos, siempre vinculados a esta víctima, en virtud de que recibía llamados telefónicos en su entorno familiar, donde se les exigía una suma de más de más de $500.000, pero luego lo redujeron a $400.000”, describió Mendoza. Así mismo aseveró que las intimidaciones apuntaban a que “si no cumplían ‘las cosas iban a suceder de otra manera’ y en caso de no entregar el dinero amenazaban con matar a la hija de la familia”. Las comunicaciones telefónicas fueron reiterativas y siempre pidiendo el efectivo a cambio.

En la investigación silenciosa del departamento policial podían deducir “lo poco profesional que tenía la situación, descartándose una inteligencia previa”, remarcó Mendoza. A pesar de ello es que se dispuso una protección policial a los integrantes de la familia Petellín. “Eso nos dio tiempo necesario para ir hilvanado una hipótesis concreta de quienes serian los autores materiales del hecho, no sólo de la extorsión, las amenazas y el intento de asalto” aseveró, para agregar luego que 15 minutos antes del intento de hacerse con la camioneta los Bonzón “habían asaltado a otra persona que se dirigía camino al frigorífico “La Paz” al que le robaron la moto que emplearon luego como medio logístico para acercarse a la víctima”.

Es por eso que calificó como “un cúmulo de hechos delictivos”, pero afirmó que los hermanos no tienen registros de detenciones previas por cometer delitos similares. “No tenían ningún vinculo con la víctima, pero tampoco había quedado luego de la relación comercial una deuda” como para comprender este accionar, señaló.