Hospitales y centros de salud de toda la provincia aplican las dosis extra de vacunas que protegen contra sarampión, rubéola y polio en niños de uno a cuatro años. La campaña se extenderá durante todo el mes de octubre inclusive, alcanzando a 90.000 chicos en Entre Ríos, por lo que desde la cartera sanitaria se instó a los padres de niños en la edad objetivo a acudir a los vacunatorios a la brevedad.
Desde este miércoles 1º de octubre se llevará a cabo la inoculación “en terreno”. Según dijo la referente del Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI), Albana Gavini, “se va a hacer un intenso rastrillaje casa por casa”.
ALGUNOS DATOS. A pesar de que aún no se han brindado datos exactos en cuanto a porcentajes de vacunación, luego de transcurridas las tres primeras semanas de labor, la marcha de la campaña se percibe como exitosa. Desde el área de Epidemiología se dijo que la campaña se está desarrollando con normalidad y que los resultados en estas tres primeras semanas responden a lo esperado.
Se precisó además que, durante las dos primeras de septiembre, se hizo todo el trabajo intramuros, en cada institución.
Se aclaró que durante el mes de septiembre se hizo un trabajo en terreno. Esta modalidad consiste en visitar las escuelas, las comisiones vecinales, los centros de salud, las cooperadoras de distintas instituciones, las iglesias y todas las entidades que estén en contacto con la realidad de cada barrio. La idea de este trabajo es planificar con los directivos de cada institución la forma de informar y de vacunar. “Pero cada uno manejaba su estrategia”, se aclaró. Se adelantó también desde el organismo de salud que en algunas comisiones vecinales ya se está haciendo el trabajo de detección de ciertos casos que pueden resultar un poco más complicados, puesto que se conocen las realidades de los vecinos desde más cerca.
RASTRILLAJE. Durante el mes de octubre se hará un trabajo más fino, más minucioso. Se trata del llamado rastrillaje. El mecanismo consiste en ir casa por casa, indagando. Primero se hacen convocatorias masivas en cada barrio para que vayan a vacunar a sus chiquitos de entre uno y cuatro años.
“Lo importante es informar –dicen desde Epidemiología– pero cada uno se tiene que manejar en su zona programática”.
QUÉ SE BUSCA. Esta campaña se realiza con el objetivo de seguir manteniendo la eliminación de estas patologías, en este caso de rubéola, poliomielitis y sarampión. Abarca a niños de un año a cuatro años, 11 meses y 29 días. La aplicación de la dosis extra se hace por grupo de edades, no porque estos chicos estén faltos de vacunas. Es una dosis extra, un refuerzo en ese grupo etario.
También se aclara que esta campaña se aprovecha de igual modo para revisar los carnés de vacunación y a captar o detectar aquellos niños que estén faltos de vacunas.
Es una dosis extra, son campañas que se hacen cíclicamente, generalmente cada cinco años y se abarca a diversos grupos. Por ejemplo, en el año 2004 se hizo con chicos, después se hizo con las mujeres y después se hizo con los varones.
En cuanto a si las madres van tomando conciencia de la necesidad de vacunar a sus hijos, la respuesta fue positiva. “Los vacunadores, que son los que están más en contacto con la población, manifiestan que las mamás están al tanto del calendario de vacunación, que saben que tienen que vacunar a sus chicos, más ahora que está la campaña –aclaran desde la entidad–. Porque estas campañas de difusión sirven para eso, para poner el tema sobre el tapete”.