PARANÁ
Transmisión de VIH a una embarazada
La Sala I de la Cámara del Crimen de Paraná condenó, por unanimidad, a tres años de prisión condicional al médico Ricardo Alcain por los delitos de incumplimiento de los deberes de funcionario público y abandono de persona en el juicio por la transmisión de VIH a una embarazada a quien se transfundió sangre contaminada, en el hospital San Roque en el año 2006. Dicha sentencia había sido solicitada por fiscal Cecilia Goyeneche y los querellantes Miguel Cullen y Miguel Retamoso, durante sus alegatos.
Al profesional se lo responsabilizó por no haber avisado a un dador de sangre que era portador del virus ni a la mujer embarazada sobre la posibilidad de que se hubiera infectado tras la inoculación, poniendo en riesgo también la salud de la beba que gestaba. “Cualquier protocolo no puede estar por encima de los derechos de protección de la salud”, expresó el Tribunal.
Asimismo, Alcain recibió cuatro años de inhabilitación absoluta para ejercer cargos públicos.
Por su parte, la otra imputada, Gabriela Coronel Campana, fue declarada inocente de la imputación por el delito de lesiones culposas por no haber realizado una correcta inscripción y control en los libros de bioquímicos del Servicio de Hemoterapia.
Cabe recordar, respecto de la bioquímica Coronel Campana, que tanto el Ministerio Público como la querella desistieron de efectuar una acusación en su contra.