ENTRE RÍOS
Los restaurantes comenzaron a retirar los saleros
En la provincia de Buenos Aires rige desde ayer la Ley 14.349, que establece que todos los establecimientos gastronómicos deben ofrecer sal con bajo contenido de sodio y no podrán poner saleros en las mesas.
También en Santa Fe se trató el año pasado una medida similar, aunque todavía no fue aprobada.
En el caso de Entre Ríos, a pesar de no contar con legislación al respecto, ya hay bares y restaurantes que se suman a esta iniciativa. En la mayoría de los locales de Paraná sólo se proporciona sal a los clientes si estos la requieren.
Algunos sitios incorporaron esta práctica por iniciativa de los mozos, que trasladaron a los encargados los pedidos reiterados que le hacían los mismos clientes. Otros, por una simple cuestión de espacio y de coquetería, omitieron colocar saleros al alcance del público.
Sin embargo, el hecho de salar desmesuradamente la comida es un hábito difícil de cambiar. “Alrededor de un 60% de la gente que viene a comer acá pide el salero”, aseguró Javier, empleado de un negocio de rubro gastronómico ubicado en la peatonal.
Asimismo, contó: “Hace más de un año implementamos la costumbre de cocinar incluso sin sal. Se reemplaza por otros condimentos, o se le echa limón, vinagre, aceto balsámico o algún aderezo”.
“Entiendo que hay lugares donde sí se colocan saleros en la mesa, pero poco a poco esto se va a ir modificando, aunque no haya una ley en nuestra provincia”, sintetizó.
Por su parte, Diego, quien trabaja en el restaurante de uno de los hoteles más importantes de Paraná, manifestó que “en eventos se estila no colocar el salero, y en el comedor, depende de la ocasión. Nosotros no recibimos ninguna orden al respecto, pero mucha gente te pide la sal y le echa a la comida sin ni siquiera haberla probado”.
“Tenemos sal yodada y sal light, que teóricamente son menos perjudiciales, pero casi nadie pide estas variantes”, concluyó.