PARANÁ
Desvalijaron la casa de la hija del ex gobernador Busti, mientras dormían en la planta alta
La casa de la hija mayor del ex gobernador Busti -Florencia de 36 años- fue desvalijada esta madrugada, mientras Florencia y su pareja se encontraban durmiendo en el piso de arriba. Los dueños de casa habían llegado cerca de las 3 de la madrugada con su pequeña beba, que justamente ayer fue retirada de la incubadora en que se encontraba desde su nacimiento. Los intrusos ingresaron tras levantar una persiana de unos 200 kilogramos, de la planta baja y se tomaron un buen tiempo para llevarse ropa, elementos electrónicos y todo lo que encontraron a mano, según se indicó a Análisis Digital.
El ex gobernador Jorge Busti y su esposa, la diputada nacional Cristina Cremer (PJ-Entre Ríos) celebraron anoche la decisión de los médicos que atendieron a la pequeña nieta de autorizar la salida de la incubadora, donde estuvo desde su nacimiento hace escasas semanas. Por eso fue que decidieron ir a cenar con amigos íntimos con su hija Florencia y su pareja, Maximiliano Alanis.
Esta mañana, a hora temprana, se sorprendió Busti con el llamado desesperado de su hija, quien con todos los nervios de la situación le contó telefónicamente que algunos “visitantes” habían intrusado la casa donde vive, en Mitre 21 –esquina de calle San Martín de la ciudad de Paraná- y se habían “llevado todo” lo que estaba en la planta baja del lugar: ropa, computadoras, otros aparatos eléctricos y casi toda la ropita de la bebé que amigos y parientes les regalaron en los últimos días.
Según trascendió Florencia le habría comentado a su padre: “decí que no nos levantamos, porque de lo contrario no sé cómo hubiera terminado esta historia”.
Lo que sorprende fue el tiempo que, evidentemente, se tomaron los “cacos” para saltar primero la reja de la puerta de entrada y forzar la ventana principal del living después. Teniendo en cuneta que es una zona donde todo el tiempo existe una circulación vehicular importante y donde se entiende que en la zona existe cierta guardia policial, máxime después del esquema de seguridad instalado en la ciudad, con agentes jóvenes en casi todas las esquinas, consigna Análsis digital.
Al parecer, los visitantes habrían utilizado algún cricket para levantar la persiana, ya que se estima pesaría cerca de 200 kilogramos y eso habrá demandado no menos de media hora. Pero luego se tomaron un tiempo similar o superior, para recorrer cada uno de los lugares de la planta baja y llevarse todo.
La casa no tiene aún alarma (la estaban por instalar en estos días) y la pareja dormía con el aire acondicionado encendido, por lo cual no escucharon nada. Los asaltantes (no menos de 3 o 4, según se entiende) retiraron tranquilamente las cosas y habrían partido en una camioneta que los habría estado esperando. Esta mañana, algunas fuentes policiales indicaron que “ciertas cosas robadas” habrían sido encontradas en una zona del barrio Humito, en una requisa que se hizo, tras la denuncia policial.