ECONOMICAS

Desde hace varios años la mayoría de los consumidores aprovecha las facilidades de pago que los comercios ofrecen para comprar productos en los distintos rubros.
Sin embargo, los tentadores planes de financiación a través de los cuales se podían pagar determinados artículos hasta en 50 cuotas sin interés, tal como ocurrió en 2010, parecen ser parte del pasado. Hoy ni siquiera es viable obtener un plan en 30 o 36 cuotas. A lo sumo, se puede pautar un compromiso de pago hasta en 24 meses, pero con una tasa de interés altísima.

En la actualidad, la financiación sin interés se consigue, pero dependiendo del rubro y de los convenios que las entidades bancarias mantengan con cada comercio en particular se extiende hasta a tres, seis y 12 cuotas. En este marco, el contador público Fernando Lenardón, integrante del Centro Comercial e Industrial de Paraná, explicó que “hoy encontrar un negocio que ofrezca un crédito de la casa es muy difícil, y si existe esta posibilidad se proponen pocas cuotas y con una tasa de interés considerable. En cambio, en la financiación a través de los bancos se da la particularidad de que existen promociones donde hasta incluso es ventajoso pagar con esta modalidad: ofrecen mayores descuentos pagando con tarjetas de crédito que de contado. Y a los comerciantes los benefician si venden a través del crédito”.

Sin embargo, los plazos no se extienden más allá del año. Por ejemplo, para adquirir un televisor LED de 32 pulgadas cuyo precio al contado es de 2.599 pesos, se puede optar por un plan de 12 cuotas sin interés de 216 pesos mensuales con algunas tarjetas. Uno de los vendedores de una casa de electrodomésticos aclaró que “se puede comprar hasta en 24 cuotas, pero no es conveniente, porque se termina pagando prácticamente dos veces el producto. Este mismo televisor, si fuese el caso, se puede financiar en 24 cuotas de 196 pesos; y se termina pagando un total de 4.704 pesos”.
Lo que hay que tener en cuenta es que estas promociones no rigen para todos los productos. “Si comprás un lavarropas la cantidad de cuotas sin interés se reduce a seis”, acotó el encargado de otro de los comercios del sector, que tradicionalmente supo ser uno de los más dinámicos en cuanto a ventas pero que, sin embargo, registró una caída del 6,1% durante abril, comparado con 2011, según reveló la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).

“Se nota mayor cautela en la gente”
Fernando Lenardón explicó: “Actualmente se nota una excesiva prudencia en la mayoría de los comerciantes a la hora de financiar, y esto repercute en las ventas, ya que la sensación de incertidumbre que se instala en la gente hace que en lugar de realizar compras para pagarlas a mediano o largo plazo prefiera ser más reservada y cautelosa, porque no sabe qué va a pasar mañana o en dos meses”.

En este sentido, el panorama es complejo para quienes tienen un excedente de dinero y prefieren invertirlo. “Hay distintos segmentos de consumidores y para aquellos que mensualmente no pueden comprar dólares con fines de ahorro tampoco es conveniente que guarden el dinero en pesos. Para quienes no llegan a comprarse una casa pero sí alcanzan a pagar un auto, esta es la opción que eligen para que no se desvalorice su capital”, explicó el profesional.

“En cambio, quienes no tienen capacidad de ahorro y compran un electrodoméstico, por ahí no se fijan en el total que terminan pagando, sino en que puedan cubrir el importe de la cuota. En algunos casos el interés mensual es del 4% o más, y esto es altísimo”, agregó.

Desde los comercios locales son reticentes a brindar información sobre las tasas de interés que se cobra por la financiación. “Es variable, según el convenio que haya con cada banco. Nosotros ofrecemos hasta tres cuotas sin interés porque absorbemos el coeficiente que nos aplican y así podemos vender”, contó  Natalia, propietaria de un negocio de ropa. Comerciantes de otros rubros consultados explicaron que a lo sumo hay seis cuotas sin interés y la gente aprovecha esta posibilidad. Y hasta en las concesionarias de motos redujeron los planes a 24 cuotas, en una operación que se hace a través de un financiera y que lleva un recargo en el precio.