Un partido de fútbol de la liga de Concepción del Uruguay terminó con incidentes
Hubo móviles dañados, personal policial lesionado y cinco detenidos
El encuentro se disputó entre el local, Gimnasia y Esgrima y Almagro.
Alrededor de las 21.30, personal policial procedió a identificar y realizar un cacheo a dos sujetos y una joven que habrían saltado el tapial perimetral del estadio hacia una tribuna que no estaba habilitada. Uno de los individuos llevaba un cuchillo tipo serrucho dentro de un gorro con visera, así como una cadena con dos argollas en cada extremo.
Para intentar evitar el procedimiento, le propinaron una patada a uno de los uniformados, el que cayó al suelo, aprovechando los malhechores para darse a la fuga. No obstante, fueron interceptados por un móvil policial, los que fueron trasladados a dependencias policiales, imputados de Infracción a la Ley 3815, por cuanto además del arma blanca, estaban en aparente estado de ebriedad. La mujer resultó tener 21 años de edad y fue trasladada a Comisaría Minoridad con su hermano de 14 años, mientras que el otro ciudadano tendría 19 años de edad. El funcionario lesionado realizó una denuncia por las lesiones recibidas.
Posteriormente, a las 23:30, luego de finalizado el encuentro, la parcialidad visitante comenzó a insultar a la platea Noroeste donde se encontraba la hinchada local, a la cual la Policía trataba de tranquilizar. Sin embargo, las personas que se encontraban en el exterior hacían cada vez más violenta y hostil la situación, los insultos se tornaron más agresivos hasta el punto en que comenzaron a arrojar piedras y palos hacia el interior del estadio tanto como contra el personal policial y móviles. Uno de los funcionarios padeció un piedrazo en la zona de su cabeza, provocándole una herida sangrante y dañando un móvil policial.
Los policías dispersaron a este grupo de inadaptados, hasta la zona de la rotonda de Urquiza y 12 de Octubre. Allí, personal de Policía Montada y Comisaría Primera, procedió a la detención en el marco de dos sujetos de 31 y 17 años de edad, por continuar promoviendo desorden en la vía pública y no querer deponer su actitud.