CALENDARIO MAYA.
VARIAS CIUDADES SE PREPARAN.
Desde hace tiempo se afirma que el calendario maya predice la llegada del fin del mundo para el 21 de diciembre, con el arribo del solsticio de verano.
Sin embargo, esta interpretación fue desmentida por los estudiosos del tema, quienes aseveran que en realidad se llega al final de una era y al comienzo de otra.
Pero a pesar de que no existe ninguna certeza acerca de que algo en particular vaya a ocurrir, los cabuleros y supersticiosos se preparan para mañana.
En Paraná y otras ciudades de Entre Ríos habrá diversas conmemoraciones para esta fecha especial. Por ejemplo, en una de las playas de la capital provincial, a las 18, se realizará una meditación colectiva con la intención de festejar “la apertura a una nueva vida”. Para participar se solicita una colaboración voluntaria que será donada al hogar Ángeles Custodios.
En Victoria también habrá una jornada de meditación, pero será el 22, para celebrar que el mundo no se terminó. “Será el sábado a partir de las 19, y partiremos desde la plaza San Martín hacia el campo. Se pide que cada uno venga con un alimento no perecedero, juguetes o ropa que luego donaremos a alguna institución, ya que tendremos la suerte de ser más felices siendo solidarios al iniciar este nuevo tiempo”, explicó Silvia Pérez Simondini, referente del museo Ovni de la Ciudad de las Siete Colinas.
Asimismo, indicó que “el mundo no se acabará, solo puede ocurrir que haya tres días de oscuridad, debido a que el planeta Tierra podría dejar de recibir la luz del sol porque se daría una serie de explosiones solares y esto puede afectar todo lo que tenga que ver con nuestros sistemas energéticos: puede ser que no haya luz, ni Internet, ni televisión ni telefonía”. La investigadora recomendó estar prevenidos por si esto ocurre: “Es mejor que cada uno tenga en su casa velas de tipo cirio, que duran siete días, por si nos quedamos sin luz; también proveerse de agua, comida suficiente, leña, fósforos, para no tener que salir a comprar nada porque no sabemos qué va a suceder”.
Esta idea parece haberse difundido y son muchos los paranaenses que tomaron precauciones por si la oscuridad se apodera de la ciudad. Miguel, propietario de una santería, contó que “además del incienso y demás cosas que la gente habitualmente adquiere para hacer una limpieza energética de sus hogares cerca de Navidad y Año Nuevo, durante estos días se incrementó en un 50% la venta de velas. Quienes vienen a comprar lo hacen por si nos quedamos sin luz a partir de mañana”.
“También nos han dicho que están guardando agua, por las dudas. Algunos compran amuletos para su casa, pero en estos casos es para tener buena suerte en el año entrante”, dijo por último.
Por el altar
Muchos cabuleros eligen ciertas fechas para casarse y aparentemente, por las dudas se acabe el mundo mañana, son varios los que pasarán por el altar para pronunciar la frase que tantos anhelan y que otros temen: “Sí, quiero”.
La jefa de Matrimonio del Registro Civil de Paraná, Graciela Amatti,“Este mes se incrementó el número de ceremonias. No sabemos si se debe por esta fecha en especial o no, pero justo este fin de semana son 26 los turnos que tenemos entregados para celebrar casamientos”.
“Es un número elevado: hay ocho el jueves (por hoy), 10 el viernes (por mañana) y ocho más el sábado”, detalló la funcionaria provincial, a la vez que agregó: “Ya desde setiembre empezó a haber más bodas, y este fin de semana y el anterior fue el tope más alto en cuanto a cantidad, en diversos horarios, incluso en días inhábiles. Son muchos los que prefieren casarse ahora”, reflexionó Amatti.
Motivos
La creencia de que tendrán una dosis extra de buena suerte en su matrimonio es uno de los motivos más aludidos entre muchos de los que eligen casarse en este contexto.
En coincidencia con el cambio de estación o el inicio de una nueva era, muchos de los que se animan entienden que esto es un aliciente para concretar el enlace y mutar de estado civil.