La llegada de un hijo es un momento trascendente para cualquier persona. Y en esa instancia crucial, los padres son los responsables de aportarles un nombre, que formará parte de su identidad. La elección responde generalmente a cuestiones de gustos, gratitud hacia otra persona, moda o fanatismo.
Y cada época marca también una tendencia en este sentido. Desde hace algunos años, Agustín y Agustina se impusieron como los predilectos, aunque poco a poco la preferencia se fue desplazando al nombre Valentín y Valentina, que fueron los más elegidos en 2011, junto a Isabella, Mía, Santino, Julián y Benjamín, según especificaron desde las oficinas del Registro Civil de Paraná, donde los bebés deben ser inscriptos antes de cumplirse el plazo de 40 días luego de su nacimiento.
Pero además de los nombres que se vuelven comunes en su uso, se destacan aquellos que no son tan habituales. En este sentido, existe un listado que se debe consultar al momento de la inscripción para saber si está aceptado por el Registro Nacional de las Personas. Si no se encuentran antecedentes, se debe pedir autorización para anotarlo como tal.
María de los Ángeles Banno, subrogante del director del Registro Civil de la Provincia, contó a diario Uno que fueron 100 nombres los que se autorizaron en 2011”.
“Se reciben las solicitudes para aprobar un nombre desde las diferentes sedes y luego se confirma su aprobación o no”. Generalmente este trámite dura unos días. Si el organismo no encuentra un antecedente, le solicita a los progenitores que lo hagan, entregando una copia autenticada de la partida de nacimiento de quien será tocayo del recién nacido. Muchas veces, si son nombres extranjeros, como por ejemplo de origen árabe o francés, se lo deriva a las sociedades que nuclean a esa comunidad para que le indiquen si hay alguien con ese nombre.
“Entre los nombres más raros con los que inscribieron a sus hijos el año pasado, te puedo mencionar, entre los femeninos: Melinka, Belenina, Astra, Iamh; los masculinos: Glastón, Chaná; y también algunos que se usan para los dos sexos y deben ser acompañados con otro nombre para identificarlos, como Otoño y Praxedes”.
Por último, la funcionaria comentó que fue “aceptado Ariel para mujeres, pero también tiene que estar escoltado por otro nombre de nena”.