Este fin de semana volverían las lluvias a la provincia. Mientras, el Sistema de Información de la Bolsa de Cereales de Entre Ríos (Siber), en su reporte semanal dado a conocer ayer señala que las tan ansiadas precipitaciones se producirían este domingo o, tal vez, el lunes. Advierte, sin embargo, que la demanda de agua del maíz, la soja y el sorgo es mayor que el milimetraje que, a priori, anuncian los pronósticos.
El informe del Siber remarca que la ausencia de lluvias que sufre Entre Ríos desde el miércoles de la semana pasada profundiza la sequía, al punto que sólo unas pocas zonas de las provincias escapan al temido color anaranjado en el mapa.
“El respiro pluvial que recibieron algunos sectores del norte de Buenos Aires, a esta altura ya es imperceptible. Es posible que la zona del centro sur de Santa Fe y el centro este de Córdoba, tengan sojas que sobrelleven este momento con mejor disponibilidad de humedad”, señala el trabajo.
La situación meteorológica, agrega, “continúa siendo estructuralmente estable. Los vientos se mantienen con direcciones poco convenientes como para acercar masas de aire con alto contenido de humedad. En las últimas horas se han observado lluvias en el sudoeste de la región pampeana, sin embargo las perturbaciones que provocan estas lluvias se ven impedidas de avanzar hacia el noreste y en todo caso cuando lo hacen se debilitan o encuentran masas de aire con bajo contenido de vapor de agua”. Consecuentemente ya sea por condiciones dinámicas o por escasez de humedad atmosférica, diciembre ha proyectado “con mucho rigor la seca a este comienzo de año”, remarca.
El Siber, asimismo, indica que los modelos de pronóstico “perfilan la posibilidad del regreso de las precipitaciones para el domingo o lunes próximo”, pero por las razones mencionadas “no pueden alentarse acumulados destacados para la provincia de Entre Ríos y, en general, para gran parte de la zona núcleo”.
La sequía, como se señaló, se generaliza en la provincia como lógica consecuencia de la falta de precipitaciones. “Si a este factor decisivo le sumamos que la evapotranspiración de los últimos 45 días ha estado largamente por encima de los valores climáticos, el efecto negativo sobre el balance hídrico se potencia. Esto ya se ha venido reflejando en la notable caída en el estado de los cultivares de maíz desde mediados de diciembre a mediados de enero”, apunta el reporte bursátil.
“El extremo climático que estamos transitando difícilmente no impacte sobre la soja. A esta altura del mes, las deficiencias pluviales son muy grandes como para esperar que se reviertan en los últimos diez días de enero. Como se anticipó es posible que lleguen lluvias entre domingo y lunes, pero lamentablemente la demanda pluvial supera sobradamente los pronósticos más optimistas”, advierte.
Al aludir a las razones de la persistencia de la sequía, el informe del Siber recuerda “el efecto negativo que la presencia de La Niña genera sobre las precipitaciones” y reafirma que la intensidad del fenómeno “se ha mantenido débil desde el comienzo de la primavera”. “Entendemos que otros factores que afectan negativamente la circulación atmosférica y que no son obvios de reconocer están fortaleciendo este escenario de lluvias muy escasas que ha ganado continuidad. A esta altura del año pasado y aun con un enfriamiento más contundente, las lluvias ya se habían recuperado”, señala.
De acuerdo a este análisis, el Siber cree que “sólo resta esperar una sorpresa en los pronósticos. Es decir, esperar que los mismos no se validen y que los acumulados terminen siendo más abundantes que los previstos. En circunstancia de sequía plena, en muchas ocasiones los modelos de pronóstico han perdido precisión a la hora de anticipar los acumulados pluviales”, concluye el trabajo.
La sequía podría extenderse hasta marzo o abril
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) recién efectuará una nueva evaluación sobre las condiciones climáticas a fines de mes, pero no se esperan cambios en la situación actual y se prevé que durante febrero, marzo y abril las condiciones sean de normales a deficitarias en cuanto a precipitaciones.
Así lo confirmó a la agencia Noticias Argentinas María de los Milagros Skansi, jefa del Departamento de Climatología del SMN.
“Recién haremos una nueva evaluación a fines de este mes: dada la situación que está ahora no creo que haya demasiados cambios, así que en febrero, marzo y abril es probable que estemos en condiciones normales a deficitarias”, señaló la especialista.
Explicó que “no se ve un cambio radical para esa época, recién comienzan a correrse los modelos y los pronósticos estadísticos, a partir del 20 de este mes y a priori no es muy alentador el panorama”.
El pronóstico del tiempo augura en lo inmediato “el pasaje de un sistema frontal entre el sábado y domingo”.
“Se darán algunas precipitaciones en la gran parte de la zona pampeana, pero con montos variables que no serían tan significativos”, explicó la climatóloga. Skansi admitió que “claramente deficitario fue diciembre” y que para “enero, febrero, marzo se está previendo una situación entre normal hasta deficitaria”.
“Seguramente en el trimestre, algunas lluvias van a ser normales, pero es imposible decir en cuáles lugares”, sostuvo a NA.
En particular, las condiciones deficitarias han sido más marcadas en el segundo semestre del año, consignó el informe del SMN.