Colón cerró este lunes la 18° jornada del Torneo Clausura montando en el campo de juego un show de despedida para su ídolo Esteban Fuertes, quien jugó por última vez en el Cementerio de los Elefantes y marcó el doblete del 2-0 sobre Godoy Cruz.
El encuentro fue un verdadero monólogo sabalero, entre las ganas del eterno Bichi, las buenas actuaciones de Iván Moreno y Fabianesi y Sebastián Prediger y la total apatía del conjunto de Omar Asad, que definitivamente no encuentra rumbo.
Hubo que esperar al minuto 22 para la primera perla del Bichi: Maximiliano Caire lo habliitó desde la derecha, su toque pegó en Nelson Ibáñez y en el rebote no perdonó.
Después, el atacante desperdició un cabezazo apenas desviado, Ibáñez le sacó otro remate y en otra jugada llegó a superarlo pero su definición fue despejada en la línea. Antes del descanso, Prediger estrelló un cabezazo en el travesaño.
A los cinco del complemento, Fuertes quedó mano a mano con Ibáñez por la izquierda y lo batió con un tiro bajo que se convirtió en el segundo. Enseguida, Alvaro Navarro vio la roja y dejó con diez a los mendocinos.
Entonces continuó el asedio santafesino, que amenazó con un toque de Fuertes que se fue cerca, un tiro desviado de media distancia de Bruno Urribarri, dos del ingresado Federico Jourdan que tapó el arquero y un cabezazo afuera de Prediger.
Fuertes se fue reemplazado a los 44, se aferró a su familia y con el pitazo final de Mauro Giannini continuó su fiesta con el cariño de la gente, llevado en andas y ovacionado por todos.
La despedida absoluta del Bichi será en el próximo duelo con Banfield, en el que el Taladro se jugará la permanencia y que adelantó que quiere jugar. Sin embargo, esta noche quedará en la memoria.