Pueblo Liebig ya es patrimonio histórico y cultural de Entre Ríos, puesto que el gobernador Sergio Urribarri promulgó la ley sancionada por la legislatura provincial, cuyo fin es preservar el valor arquitectónico y urbanístico de esa localidad del departamento Colón.
Liebig es un poblado fundado en 1863 que surge por la actividad comercial de la Inglaterra Victoriana. En aquella época se erigieron construcciones hoy históricas que es necesario preservar en su casco urbano, al igual que la legendaria chimenea del frigorífico que más de una vez se intentó desmantelar, pero no fue posible por la resistencia de los vecinos.
Ahora todas esas construcciones mantendrán su impronta original a partir de la ley 10147 que fue aprobada en la legislatura y promulgada por el Poder Ejecutivo provincial.
La normativa señala que están comprendidas en la declaración todas las construcciones existentes en el radio urbano de dicha localidad, predio deportivo, balneario, casas habitaciones, instalaciones, mobiliario, sean privadas o no, y edificaciones que “serán considerados Lugar Histórico Cultural de Entre Ríos y quedarán sujetos al régimen de Monumento Histórico Provincial”.
Respecto a esos bienes, queda prohibida toda destrucción, modificación, reforma, ampliación, refacción, refuncionalización o intervención que afecte las edificaciones protegidas, tanto en su estructura arquitectónica como morfológica, “sin contar con la previa y expresa autorización del Área Patrimonio Cultural y Ambiental de la Subsecretaría de Cultura o la entidad que en el futuro la sustituya”.
Tampoco podrán ser cambiados de destino los edificios sin contar con la autorización precedente. Cualquier intervención que deba realizarse sobre ellos y que se vincule a alguna de las actividades enumeradas deberá contar con el asesoramiento técnico especializado y pertinente, debiendo para ello el Poder Ejecutivo provincial proveer personal idóneo para cumplir con la finalidad proteccionista.
Por otra parte, se precisa que la administración, uso y gestión de los bienes afectados que pertenezcan al dominio público, quedará confiada a la junta de gobierno de Pueblo Liebig o autoridad que la sustituya en el futuro, quien ajustará su utilización a las limitaciones emergentes de declaración.
Por último, se prevén sanciones económicas para quienes intenten algún tipo de agresión, deterioro o destrucción de estas propiedades.
Fundamentos
La iniciativa fue presentada por el senador provincial Oscar Arlettaz, quien, entre otros conceptos, en los fundamentos mencionó que Pueblo Liebig, “poblado fundado en 1863, surge como consecuencia de una actividad comercial de la Inglaterra Victoriana y es un ejemplo característico, que debe preservarse por su valor arquitectónico y urbanístico y como muestra del poderío económico del imperio británico en el mundo. Estos terrenos pertenecientes a la firma Liebig, luego pasaron a formar parte del ex Frigorífico Colón SA hoy abandonado y desmantelado”.
Además, se indicó que Pueblo Liebig fue la primera localidad en contar con agua corriente, luz eléctrica, hielo y sanitarios adecuados.
También se hizo hincapié en que Pueblo Liebig fue definiendo como su principal producto turístico su patrimonio arquitectónico-urbanístico, que se busca preservar de su destrucción.
Detalles urbanísticos
En el trazado del pueblo se distinguen los distintos sectores que lo componen, bien diferenciados: la fábrica, el barrio de obreros y personal jerárquico. A su vez ésta diferenciación se deduce por la forma de agrupación de viviendas, tipos de acceso y detalles arquitectónicos. Las características de ésta arquitectura no tiene antecedentes locales, responde a exclusivamente a tipologías de uso en Inglaterra, destacándose la excelente técnica constructiva.
En cuanto al esquema de organización del pueblo, los ejes de cada barrio forman un ángulo en cuyo vértice se encuentran las instalaciones industriales. De la administración y la fábrica partía la manga para acceso de animales, que atravesaba todo el núcleo urbano. A la vez formaba una barrera de separación entre los barrios: el pueblito y los chalets. En el pueblito residían capataces, obreros y demás personal administrativo. Allí estaba la escuela, el club Liebig y el establecimiento comercial, un gran edificio que servía de proveeduría, estafeta y sitio de reunión.
Las viviendas responden a tipologías muy simples, de largos frentes con zaguanes que eran acceso a dos de ellas, el que era macado por un arco de medio punto que desembocaba en el patio, espacio común para todos, aunque se delimitaba cada propiedad por una cerca.
Otros edificios destacables son la Biblioteca, el Lawn tennis, la Oficina de Correos.
Sobresale el edificio el Mess, amplio y equipado para personal jerárquico sin familia y visitantes, y la suntuosa casa de visitas para los patrones de Europa.
En cuanto a materialización se observan excelentes mamposterías de ladrillos, estructuras de hierro y cubiertas de chapa de vistosas resoluciones con un elemento importante, las chimeneas. Las carpinterías en general son de madera y las galerías cerradas con tejido metálico.