El caso está en manos del fiscal Lisandro Beheran de la ciudad de Gualeguaychú, quien ya dispuso medidas para avanzar en el esclarecimiento del caso. A su vez, el jefe de la Jefatura Departamental Gualeguaychú, Jorge Lazzari, desmintió que el joven haya sido golpeado y negó que la fuerza no informara sobre el episodio que se conoció a través del diario La Región.
Según denunció Mario Escalante, de 30 años, todo sucedió el domingo 15 de julio a la salida del boliche La Tienda Disco. Allí, el hombre que es padre de dos hijos menores, habría sido golpeado por al menos cinco policías tras un incidente en el interior del local.
Si bien Escalante reconoció haberse pasado de tragos: “Estaba bien mamado”, dice que no puede creer que los uniformados le hayan dado semejante paliza. “No soy un delincuente, jamás robé”.
“Yo estaba en La Tienda Disco y había tres muchachos que no los conocía, no sé si eran de Gualeguaychú o de Basavilbaso. Me miraron con cara fea y uno me dijo ‘¿Vos sos pesado?’. Por los hijos míos que le dije ‘déjate de joder loco’. Me dijo ‘Vamos a salir para afuera’, a lo que respondí que bueno. Cuando bajo la escalera del boliche viene un policía, me agarra del cuello adelante de la gente. Yo no hice nada, hay muchos testigos; forcejeamos y el policía fue como que se cayó, después viene otro policía y me saca para atrás para el callejón”, así comienza el relato Escalante, quien denunció lo ocurrido ante el fiscal Beheran.
Entre empujones terminó caído en el veredón del parque. “Un policía se sacó la campera y me pegó una patada en el suelo, ahí me levanté y le hice frente, dispararon, después se vinieron como cinco o seis y me corrieron. Disparé como cinco cuadras porque si me llegaban a alcanzar me mataban”. El agredido dice “no les tengo miedo, pero tengo que estar tranquilo por mis hijos”.
Por las lesiones una ambulancia del hospital Manuel Belgrano lo trasladó al nosocomio. El fuerte golpe en la cabeza requirió puntos y el daño en su rostro está a la vista. Todo esto fue corroborado por el médico policial de Gualeguaychú. Oscar Chiappetti. Escalante reclama justicia con los agresores. “No puede ser, todo el mundo sabe la delincuencia que hay en la calle, y no se hace nada, y uno que llega el sábado se toma una cerveza y se mama, como decimos nosotros, nos mamamos, pero llegamos a nuestra casa y estamos tranquilos”.
Además, añadió que lo sucedido lo afecta también a nivel económico. “Estoy perdiendo hasta el trabajo así. Qué les doy de comer a mis hijos, ¿le voy a golpear la puerta a la Policía que me den trabajo ahí?”, se preguntó el muchacho que trabaja en un corralón local y que por varios días no pudo ir.
La denuncia está en manos del juez Eduardo García Jurado del Juzgado de instrucción Nº 1. Ya hay seis testigos que sostienen los dichos del denunciante, quien expresó que si se fue de boca o estaba molestando por estar ebrio: “Me hubieran metido preso, pero no matarme a palos como lo hicieron”.

La Policía aseguró que no golpeó a Escalante
Jorge Lazzari indicó que la intervención policial se dio tras un incidente en el interior del boliche entre Escalante y otro hombre.
Según el jefe de la Departamental, cuando Escalante es retirado del local golpeó a un policía y escapó. En el camino se cayó al asfalto, tras ser interceptado por la Policía. En esa situación, Escalante se paró y siguió corriendo hasta meterse a una casa. Lazzari sostiene que la propia Policía llamó la ambulancia al ver lesionado al joven producto de la caída, de la pelea y el forcejeo en la zona de baños del local.
Lazzari precisó “Como jefe de Departamental ordené la sustanciación de actuaciones administrativas para delimitar responsabilidad y establecer formas y circunstancias en que se produjeron los hechos, entonces se instruyen dos causas, una la causa penal con conocimiento del Juzgado y una causa administrativa para poner en claro la parte policial”.