El problema de la basura es una preocupación constante en la mayoría de los municipios. La expansión demográfica que se registra en las distintas localidades y los hábitos de consumo provocan habitualmente la proliferación y acumulación de desperdicios que, al no ser tratados, producen un impacto negativo en el ambiente.

En un intento por resolver estas cuestiones, algunos municipios determinaron aunar esfuerzos para encontrar soluciones conjuntas frente a una problemática común.

El año pasado los avances se plasmaron en convenios firmados entre varias de las comunas entrerrianas, como fue el de la microrregión Tierra de Palmares (integrada por las localidades de Colón, San José, Villa Elisa, Colonia Liebig, Primero de Mayo, Ubajay, San Salvador, General Campos, San Anselmo, Hocker, La Clarita y Arruyo Barú), y en algunos esfuerzos particulares para comenzar a separar la basura en origen e iniciar un proceso de reciclado, que se suman a los que ya vienen funcionado, de modo parcial.

En este marco, Viale arrancó hace un año y medio con una experiencia que generó alrededor de 10 puestos de trabajo, destinados a quienes ya se venían ocupando de la basura, pero de manera informal y sin las condiciones necesarias de higiene y seguridad.

“Trabajamos de forma particular, pero es nuestra intención plantear que se sumen otras localidades cercanas para la posible instalación de un basural regional, adonde confluyan los residuos de varias localidades”, comentó el intendente de esa localidad, Estelio Urchueguía, quien entendió que esta posibilidad “es ideal para la zona, ya que se trata de un corredor de pueblos con distancias breves entre ellos”.
Según indicó el jefe comunal, este tema está incluido en la agenda de la próxima reunión de la Liga de intendentes de Pueblos Justicialistas, integrada por las comunas de Viale, Hernandarias, Hasenkamp, San Benito, Crespo y Seguí.

El secretario de Ambiente Sustentable de la Provincia, Fernando Raffo, indicó que “este tipo de iniciativas constituyen una solución para el problema de la basura, pero para poder implementar un sistema de tratamiento, se requiere producir una cantidad cercana a las 100 toneladas diarias. Excepto Paraná, Concordia y Gualeguaychú, que tienen una cantidad considerable de habitantes, las demás comunas deben agruparse para este tipo de emprendimientos”.

“Actualmente hay un convenio firmado en las que se denomina la región Metropolitana, integrada por Paraná, San Benito, Colonia Avellaneda y Oro Verde. La idea es trabajar en forma conjunta para que el tratamiento del tema de trasferencias y rellenos sanitarios sea a escala regional, pero por ahora es un proyecto y cada ciudad trabaja en forma separada”, concluyó Raffo.

Avanza el proyecto en Paraná y se consolida el trabajo en Viale
En procura de soluciones a la problemática de la basura, Fernando Raffo aclaró que “las cuestiones técnicas para brindar una respuesta a este tema están resueltas, se conoce cuál es la solución que se debe encarar, pero lo que está faltando es un cambio cultural y en muchas casos un financiamiento económico”.

Frente a este panorama, el problema del Volcadero en Paraná llevó a que la resolución de este tema se transforme en prioritario para la gestión y se está elaborando un proyecto integral, que se pondrá en funcionamiento el próximo año de manera articulada entre distintas instituciones. El secretario de Medio Ambiente municipal, Leonardo Centurión, señaló que “se está organizando un plan de concientización de separación en origen y reciclado, para lanzarlo en el 2013 de manera articulada con escuelas, docentes y organizaciones sociales. La idea es llevar adelante un trabajo serio, para obtener resultados concretos”.
En referencia al tratamiento de los residuos, el funcionario afirmó que “se está trabajando por un lado en la instalación de una planta de clasificación y transferencia, y por otro, en la localización de un predio para ubicar relleno sanitario, que ya aclaramos que no será en La Picada, sino en otro terreno en las afueras de Paraná, que se está viendo todavía”.En Viale, se comenzó a trabajar hace un año y medio con la separación en origen y reciclado. “Primero fueron dos barrios y ahora son cinco, pero falta concientización para que entre todos se pueda solucionar el tema de la basura”, contó  su intendente, Estelio Urchueguía.En esta ciudad, lo que se logra reciclar se vende a través de un sistema de licitación. La última venta reportó un ingreso cercano a los 19.000 pesos. “El 85% se reparte entre los 10 trabajadores y el 15% se destina a maquinarias e implementos”, explicó Urchueguía.