El juez de Instrucción en feria Héctor Villarrodona investiga la denuncia de una mujer que asegura haber sido abusada por el presidente de la Junta de Gobierno de Sauce Montrull. A causa de la denuncia policial, un grupo de familiares y vecinos de la pequeña localidad aledaña a Paraná, agredió al acusado a cadenazos, le dañó la camioneta y le pintó el frente del salón.
Desde la comisaría de Colonia Avellaneda se confirmó la existencia de la denuncia de una mujer de 24 años y de su madre, quienes acusaron a Carlos Sala de ser el supuesto responsable de acoso sexual y de abuso sexual simple.
En este sentido, la madre de la víctima, Claudia Acosta, informó que el incidente se registró el viernes a la mañana.
“Mi hija se encontraba en el salón de la Junta de Gobierno, limpiando, y en un momento llegó este hombre e intentó sobrepasarse, tras pedirle que no se resistiera, la abrazó y la manoseó, pese a que mi hija intentó evitar el desagradable momento”, explicó la mujer quién añadió: “Ella pudo zafar tras un esfuerzo importante. Luego salió del lugar y le tiró las llaves del salón”.
La joven le contó del incidente a la madre, por lo que de inmediato se trasladaron hasta la comisaría de Colonia con el fin de radicar la denuncia.
Al tomar conocimiento, el juez ordenó continuar la causa que derivará en las próximas horas con la confirmación en sede judicial de la denuncia contra la principal autoridad política de Sauce Montrull.
El denunciado, de 43 años, también realizó una denuncia. Se confirmó desde la comisaría que Sala hizo saber que la madre y la hija fueron las responsables de los daños importantes a su camioneta Chevrolet de color blanca que pertenece a la Junta de Gobierno, de la pintada en el frente del salón y de lesiones sufridas en su cuerpo.
Acosta admitió en declaraciones ser la responsable de estos hechos. “Pero cómo no voy a defender el honor de mi hija. Con una cadena de moto lo fui a buscar y lo ‘cag... a palo’, ya que él no tiene el derecho de abusar de nadie”.
“Mientras le pegaba, nos pedía perdón y disculpas, pero lo siento. Por ello es que le dañamos la camioneta y luego, junto a otro grupo de vecinos, fuimos al salón y lo escrachamos para que la gente sepa qué persona es la que está al frente”, admitió la ofuscada madre.
Por su parte, el acusado, Carlos Sala, negó los hechos denunciados y aseguró que es parte de una campaña de desprestigio de distintos sectores que se unieron, luego de que les ganara las elecciones.
“Me han hecho un gran daño moral, personal y familiar, pero a Dios gracias la gente me conoce y sabe que soy incapaz de hacer algo así. Lo bueno de todo esto es que está judicializado y en un tiempo se conocerá la verdad, que soy inocente y que soy víctima de una bestial campaña de desprestigio de la más baja estofa”.
Sala indicó que aclarará en la Justicia todo lo que sea necesario para “dejar en evidencia que estas mujeres mienten descaradamente”