La Selección sigue ganando en solidez en su camino hacia el Premundial de Caracas (debuta el viernes vs. Paraguay). El domingo, ante una República Dominicana disminuida por las ausencias de Jack Michael Martínez y Francisco García, tuvo pasajes de buen nivel colectivo y otros en los que bajó el pie del acelerador, pero le sobró para quedarse con el triunfo por 74-67 y ponerse 3-0 en la Copa Tuto Marchand. Lunes, a las 21.30 (DirecTV Sports y TyC Sports), define el título con el local Puerto Rico (3-0), que le ganó 84-81 a Brasil.

Argentina sólo la pasó mal en el arranque, cuando los dominicanos corrieron bien la cancha y aprovecharon los rebotes ofensivos (nueve en el PT). Pero cuando los nuestros se asentaron, dominaron a voluntad. Pasaron al frente 20-16 sobre el final del 1º cuarto tras un parcial de 7-0 con un Scola brillante (8 puntos y hasta una volcada) y un Campazzo genial en la conducción (tres pases gol). Y la diferencia creció en el inicio del 2º con un parcial de 11-0 a puro básquet total. Sí, porque fue una delicia la manera en que la Selección se pasó la pelota para encontrar al mejor ubicado. Así llegaron bombas de Safar, Espinoza y Mainoldi para el 31-19 en 15m. El rival no supo qué hacer en el ataque estacionado ante la buena defensa nacional y el conjunto de Lamas por momentos dio una clínica ofensiva, con la rotación y el pase extra a pleno (10 asistencias sobre 15 conversiones en el PT) sin importar los nombres que estuvieran en cancha. El dominio colectivo fue mucho más grande que lo que marcó el resultado al llegar al descanso largo: 38-29.

A los ponchazos, guapeando con Fortuna, Coronado y algo de Báez, Dominicana llegó a ponerse a dos (46-44) ante una Argentina que bajó bastante su eficacia y rotó mucho (Bortolín tuvo sus primeros minutos en el torneo y Scola -jugó sólo 15m- casi no pisó cancha en el ST). Un triple de Juan Gutiérrez sobre el cierre del 3º le dio algo de aire (53-46). Fue un presagio, porque después cayeron bombazos de Mainoldi y dos de Laprovittola, quien regresó tras el esguince de tobillo, para volver a escaparse (66-54) a 4m50. Y cuando el rival se acercó, Campazzo y Mainoldi castigaron con triples. Y a otra cosa.