Mario Pontaquarto, el "arrepentido" de la causa por los presuntos sobornos en el Senado que terminó hoy con la absolución de el ex presidente Fernando De la Rúa y otros siete acusados, dijo hoy que hubo un "fallo vergonzoso" por parte de la justicia federal y que tiene una "sensación de tristeza y de angustia".
 

"Me llena de angustia, yo esperaba que cuando empezara el juicio las pruebas afloraran como en todos los años anteriores. Conté la historia hasta el cansancio durante diez años", dijo Pontaquarto a la salida de los tribunales. Se trata del ex secretario parlamentario que en 2003 relató que en 2000 trasladó $5 millones de pesos para senadores peronistas que debían garantizar la aprobación de la ley de flexibilización laboral.
 

"El fallo fue vergonzoso, tenían la oportunidad histórica que juzgar a un delito de corrupción", agregó Pontaquarto, que también fue absuelto en la causa que investigaba el presunto pago para la aprobación de la reforma laboral.
 

El expediente se había iniciado en 2003 por la propia confesión de Pontaquarto. "Yo debería haber tenido una condena porque declaré y me autoincriminé en la causa de corrupción", dijo hoy el ex secreatario parlamentario.
 

Consideró que a partir de ahora "nadie se va a animar a declarar nada después de una sentencia de estas características", aunque señaló que "la querella y los fiscales van a apelar en las instancias que sean necesarias".