La Agencia Santafesina de Seguridad Alimentaria (ASSA), dependiente del Ministerio de Salud de la provincia, emitió en la jornada de hoy una alerta por ántrax. "El cuadro comienza con una violenta gastroenteritis, vómitos y deposiciones hemorrágicas", advirtió el ministro de Salud santafecino, Mario Drisun, quien aconsejó evitar la ingesta de alimentos de dudosa procedencia. Por su parte, la Agencia Santafesina de Seguridad Alimentaria (Assal), reconoció "la aparición de casos de carbunco en animales y personas (enfermedad virulenta y contagiosa frecuente y mortífera en el ganado lanar, vacuno, cabrío y a veces en el caballar, además es transmisible al hombre), ocurridos en el territorio santafesino y que ocasionaron una muerte".
Por tal motivo, alerta "a que se adquiera y se consuma carnes y derivados provenientes de establecimientos y lugares seguros".
Desde la agencia, se hizo conocer que se recibieron alertas "sobre prácticas llevadas a cabo por personas que se dedican a la compra de animales enfermos, moribundos y muertos por distintas enfermedades (muchas de ellas transmisibles al hombre) para su posterior comercialización", siendo las formas "más comunes de expendio la carne picada, chorizos y milanesas".
Por ello, en los años 2013/2014 se comenzó un trabajo junto "al Ministerio Público de la Acusación, el que ha librado diferentes órdenes de allanamiento para la realización de procedimientos en las localidades de Sastre, Gálvez, San Carlos Centro y San Jerónimo Norte, donde se han encontrado elementos relacionados al tema, los cuales se han puesto a disposición de la justicia para su evaluación".
En el mismo sentido, se concretaron reuniones entre Assal, Ministerio de la Producción, Dirección Provincial de Promoción y Prevención de la Salud, Senasa y el Colegio de Médicos Veterinarios, a los efectos "de articular políticas públicas a llevar adelante de manera conjunta".
Otros antecedentes
Durante los meses del verano 2001-2002 en los departamentos Las Colonias y Castellanos de la provincia de Santa Fe se produjeron brotes de esta enfermedad, que si bien no era desconocida, se la consideraba de muy baja presentación, a tal punto que muchos productores no tenían considerado el uso de vacunas preventivas dentro de sus prácticas habituales.
¿Qué es el ántrax?
El carbunco, también conocido como ántrax, grano negro, fiebre esplénica, es "una enfermedad contagiosa causada por el Bacillus anthracis, una bacteria que puede encontrarse en animales enfermos o cadáveres de animales muertos por el proceso, y en suelos contaminados -en los cuales puede sobrevivir por más de cincuenta años- a partir de los excrementos y secreciones de los animales enfermos. Cuando la bacteria se expone al oxígeno del aire, forma esporas que son muy resistentes a los agentes físicos y químicos".
En el hombre
La severidad del carbunco en el hombre varía según el modo de contagio (gastrointestinal, cutáneo o respiratorio) y la velocidad del tratamiento.
La cutánea se contrae por contacto con animales infectados o cadáveres, lana, cueros y pelos contaminados. En la parte expuesta de la piel aparece una lesión que evoluciona hacia la formación de una escara negra y deprimida y si el paciente no es tratado, la infección puede progresar hasta producir septicemia y la muerte.
La forma pulmonar se contrae por inhalación de esporas de Bacillus anthracis. Al principio de la enfermedad, la sintomatología es leve y semejante a la de una infección común de las vías respiratorias superiores, unos tres a cinco días después los síntomas respiratorios se agudizan, con fiebre, shock y eventual muerte.
El carbunco gastrointestinal se contrae por la ingestión de carne contaminada, proveniente de animales enfermos o sus despojos; y se manifiesta por una violenta gastroenteritis con vómitos y deposiciones hemorrágicas. La letalidad puede llegar al 75 por ciento, publicó La Nación.
En animales
La enfermedad afecta a bovinos, ovinos, caprinos, equinos, porcinos y a los caninos. Los síntomas son fiebre, síntomas nerviosos, dificultad respiratoria, convulsiones y muerte. Con frecuencia se observa una descarga espumosa y sanguinolenta por la boca.
Para el hombre, la fuente de infección son siempre los animales infectados, sus productos contaminados o la contaminación del medioambiente por esporas procedentes de estos últimos