Dando respuesta a la demanda de los vecinos presentada en las audiencias públicas llevadas adelante en 2014, donde se requería un espacio para llevar adelante natación fuera de la temporada estival y a la vez aprovechar este recurso acompañando tratamientos de rehabilitación, el Municipio comenzó hace un tiempo a trabajar en el proyecto. Para eso, funcionarios del Área Municipal de Deportes y la Secretaría de Obras Públicas recorrieron otras ciudades que cuentan con natatorios cerrados a fin de tomar las mejores ideas aplicables en la pileta municipal de nuestra ciudad.
A partir de ahí se creó un diseño en el que se empezó a trabajar. Actualmente, en el corralón municipal, personal de obras públicas construye la estructura que cubrirá toda la superficie de la pileta. La misma se fabrica con chapa galvanizada y tendrá 19,5 m. de ancho por 4,70 m. de alto. La pileta requiere de cerramiento y climatización, esto último se logrará a partir del funcionamiento de calderas que se instalarán una vez finalizada la estructura.
La pileta municipal es un espacio ampliamente aprovechado en los meses de verano por grandes y chicos, no solo para la enseñanza de natación sino también para el uso recreativo. Generar las condiciones para que pueda ser utilizada todos los meses del año significa una oportunidad de aprovechar recursos locales para potenciar la práctica de natación y otros deportes acuáticos, así como también disponer de su utilización con fines vinculados a la salud.