La Confederación General del Trabajo difundió este jueves su informe de estadísticas que arrojó una inflación de 2,7 puntos en diciembre por lo que la suba de precios registrada por la central obrera en el año trepó al 27,12 por ciento. Según el informe, la canasta básica aumentó en el último mes de 2017 un 1,4 por ciento.De acuerdo al informe del observatorio de datos económicos y sociales de la CGT, en diciembre de 2017 una persona necesitó 2.357 pesos para no ser indigente, lo que da un total de77,51 pesos por día. En tanto, según la central obrera un adulto necesitó de 5.451 pesos para no ser pobre.

En lo que respecta a los ingresos familiares, una familia tipo precisó de 7.355 pesos para no caer en la indigencia, mientras que para no ser pobre en diciembre pasado una familia compuesta por dos adultos y dos menores necesitó unos 16.547 pesos para no ser pobre.

La inflación estimada por la CGT está a tono con las proyecciones realizadas hasta el momento por las consultoras privadas que oscilan entre 2,5 y 3 por ciento para el último mes de 2017.

Según publicó Ámbito, la medición oficial del Índice de Precios al Consumidor nacional se conocerá el jueves 11, cuando el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) de a conocer la variación del costo de vida del último mes del año. 

Consultoras privadas

En sintonía con lo difundido este jueves por la CGT, las consultoras privadas prevén una inflación de casi puntos porcentuales para el último mes del año y ubican a la inflación de 2017 entre el 25 y 26 por ciento.

Según la consultora FIEL, la inflación en diciembre se ubicó en torno a los 4 puntos, la más alta del año, lo que lleva al incremento generalizado de precios de 2017 a un 26,3 por ciento, casi 10 puntos más que la meta fijada por el Banco Central para todo el año, que era de 17 como máximo.

Otras consultoras también relevaron una fuerte aceleración de la inflación. Ecolatina, por ejemplo, la estimó entre 3 y 3,1, gracias a las fuertes subas en rubros como vivienda, atención médica o transportes.

La fuerte suba en materia inflacionaria se debe principalmente a que en diciembre entró en vigencia el tarifazo a la luz y el dólar subió un 8 por ciento, con el impacto que esto tiene en los precios de la canasta básica.

Para el primer bimestre del año el panorama no es más alentador, ya que se anunció una fuerte suba al transporte. Además, se espera la segunda parte del aumento a la luz y la estacionalidad en rubros como el turismo, por lo que se espera entre un 4 y un 5 por ciento de inflación para enero y febrero.