De los seis corredores viales que se van a construir con el modelo de Participación Público Privada (PPP), hay cuatro en los que participan tres empresas que fueron mencionadas en la causa judicial de los “cuadernos de la corrupción”. Se trata de José Cartellone, Vial Agro y Corporación América, que firmaron contratos para construir los corredores viales A, C, E y F, por 3.535 millones de dólares. Esta situación impactó de lleno en los bancos internacionales, que iban a prestar el dinero para las obras y decidieron dar un paso al costado hasta que se aclare la situación de cada una de las empresas involucradas. Es que el ex titular de la Cámara Argentina de la Construcción, Carlos Wagner, reveló que durante el kirchnerismo funcionó un "Club de la Obra Pública", integrado por empresas que pagaban coimas para quedarse con las principales obras de infraestructura.
En esa declaración, como "imputado colaborador" de la Justicia, Wagner mencionó a José Cartellone Construcciones Civiles y a Vial Agro, entre las compañías que formaban parte de ese Club, que pagaban coimas a funcionarios kirchneristas por una cifra que oscilaba entre el 10 y el 20 por ciento del total de cada obra pública.
Además, el ex chofer de Roberto Baratta, Oscar Centeno, involucró indirectamente a Hugo Eurnekian, presidente de una de las empresas de Corporación América y sobrino de Eduardo Eurnekian, en la entrega de bolsos con coimas para funcionarios kirchneristas.
Mientras la Justicia dilucida la responsabilidad de cada una de las empresas mencionadas en este escándalo de corrupción, el gobierno creó un fideicomiso que les prestará plata a los consorcios que se adjudicaron los PPP, para garantizar la construcción de los seis corredores viales.
El corredor A fue adjudicado a un consorcio integrado por Vial Agro, Paolini Hermanos y la italiana INC. La obra unirá las localidades bonaerenses de Las Flores con Coronel Dorrego y Olavarría con Mar del Plata.
El corredor B, que va desde Luján hasta Santa Rosa (La Pampa), lo harán la china CCA Civil Panamá y Green SA, pese a que no fue la propuesta más económica. Algo similar ocurrió con el corredor C, a cargo de José Cartellone, para construir 778 kilómetros en la Ruta Nacional 7.
El corredor vial Sur fue adjudicado al consorcio de Rovela Carranza, JCR y la portuguesa Mota-Engil. Mientras que los corredores E y F fueron adjudicados a un consorcio integrado por Helport (una empresa de Corporación América, de Eduardo Eurnekian), Panedile, Eleprint y la española Copasa para construir rutas entre Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba.