SAQUEOS EN BARILOCHE.
ENVIAN 400 GENDARMES.
El gobierno nacional dispuso el envío de 400 gendarmes a Bariloche, ante la violencia y los saqueos que conmovierona los habitantes de esa localidad, confirmaron fuentes oficiales.
La información también había sido oficializada por Miguel Ángel Pichetto, senador por Río Negro del Frente para la Victoria, quien destacó que la decisión fue tomada por pedido del gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, quien dispuso además el envío de 150 policías del resto de la provincia.
Al analizar las responsabilidades de lo que sucede, Pichetto atribuyó los saqueos a "grupos duros con posiciones anarquistas" y origen en la "extrema izquierda", que poseen "características delictivas" y recordó que ya "habían provocado disturbios hace pocos meses frente al Centro Cívico".
El presidente de la bancada kirchnerista del Senado manifestó que entre los atacantes de los comercios hay "algunas posturas fuertemente ideologizadas, que son la punta de lanza de este conflicto" y negó que la situación haya sido producida por "organizaciones sociales comprometidas con la pobreza".
Además, el senador kirchnerista dijo que "este es un tema que indudablemente responde a componentes muy parecidos a los que actuaron encapuchados en la Casa de Tucumán, para poner algún perfil de analogía", a los que describió como "corrientes que vienen del indigenismo duro".
En diálogo con Radio Nacional, Pichetto señaló que Bariloche tiene "una situación de fractura social muy grande" y son "los grandes barrios que rodean la ciudad, especialmente los llamados Barrios del Alto, donde en algunos casos hay pobreza extrema".
El jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, ofreció una rueda de prensa en la Casa Rosada, en la que leyó la carta con el pedido de ayuda que envió el gobernador de Río negro, Alberto Weretilneck.
El funcionario se refirió a lo que sucede en Bariloche, tras reunirse con el intendente de la ciudad rionegrina, Omar Goye, para analizar la situación en ese municipio.
Al respecto, Abal Medina confirmó que la Presidente resolvió enviar a las fuerzas federales, "a efectos de dar colaboración en el cuidado de la ciudad" de Bariloche.
"Estos hechos, protagonizados por pequeños grupos marginales muy violentos, junto con los hechos que ocurrieron en Neuquén, donde la mitad de la población quedó sin luz, nos hablan de cuestiones muy particulares que no casualmente ocurren el 19 y 20 de diciembre, por lo que estamos alerta", advirtió el jefe de Gabinete.
Para cerrar el tema, Abal Medina agregó: "Este gobierno condena de forma enérgica y profunda cualquier tipo de manifestación violenta que atente contra la paz social que tenemos los argentinos".
Antes de partir, el secretario de Seguridad Sergio Berni dijo que no le cabían dudas de que existe un trasfondo político -también el gobierno provincial denunció intencionalidades- y adelantó que los agresores ya fueron identificados.
Se negó, sin embargo, a dar más detalles debido a que en el tema interviene la Justicia.
Quien también aseguró que se había podido identificar mediante fotografías y videos a los vándalos fue el intendente de Bariloche, Omar Goye. En ese sentido, aseguró que "el Estado va actuar con toda la fuerza de la ley".