DESIGNACIONES POLEMICAS.
MAS DE LA MITAD DE LOS SENADORES EMPLEAN PARIENTES.
Hijos, maridos, hermanos, sobrinos. También novias. La designación de familiares en el Senado dibuja un amplio árbol genealógico que no distingue ideologías, partidos ni provincias. Más de la mitad de los senadores empleó a allegados como secretarios o asesores. Son personas de confianza, técnicos con experiencia o miembros de aceitados equipos de trabajo, aseguran los legisladores. Muchos viven en las provincias, lejos del Congreso. Un total de 41 senadores designaron a personas de su núcleo íntimo. Algunos forman parte de la planta permanente de la Cámara, es decir, que permanecerán como empleados públicos cuando termine la gestión familiar. Y un grupo percibe sueldos de los más altos en la escala jerárquica parlamentaria, con salarios que superan los 32.000 pesos mensuales sin contar extras como título universitario o antigüedad. El listado incluye una cuota de farándula: dos ex Gran Hermano caminan los pasillos del Congreso.
Cuando era presidenta provisional del Senado y tercera en la línea de sucesión presidencial, Beatriz Rojkés de Alperovich nombró a tres familiares. Carlos Rojkés, su hermano, supo encargarse de los asuntos protocolares del Senado. Ahora está afectado al despacho privado de la senadora, al igual que Verónica Rojkés y Lucía Temkin, sus dos sobrinas.
Otro hombre del riñón de los Alperovich, el senador Sergio Mansilla, empleó a su hija y a su hermana, con funciones administrativas. El kirchnerismo tucumano ya había dado muestras de nepotismo: más de una decena de familiares de Alperovich fueron nombrados en el gobierno de la provincia.
El presidente del Frente para la Victoria en el Senado, Miguel Ángel Pichetto, nombró a su hija, Carolina, como asesora del bloque kirchnerista.
La Rioja es la provincia con más familiares designados. El ex presidente Carlos Menem encabeza la lista: nombró a cuatro. Uno de ellos es su hijo Carlos Nair, que se hizo famoso en el reality Gran Hermano. Hasta octubre de 2013, su contrato de locación de servicios era de 6.000 pesos mensuales.
En el despacho de Menem también trabaja su hermano Eduardo (fue electo senador cuatro veces), que ahora goza de uno de los contratos más altos de la cámara. El ex presidente también nombró a un Yoma (un primo que trabaja en el bloque kirchnerista) y a Carola Menem. La situación del ex mandatario preocupa en el Senado: con 84 años no asiste al recinto desde hace dos años y suma nueve ausencias en 2014.
Todos los colores políticos
La tendencia se extiende a todo el arco político. Ernesto Sanz, líder del radicalismo, nombró a un primo en el bloque de la UCR. Diego Santilli , senador de Pro, designó a su hermana. En la centroizquierda, Jaime Linares tiene a su hija de 26 años como secretaria. Pino Solanas nombró a una sobrina. El socialista Rubén Giustiniani trabaja junto a su esposa.
"El Senado es un gran árbol genealógico. Todos los senadores que pasan dejan algún pariente en planta permanente", explicó un asesor de carrera con más de 30 años de antigüedad en la Cámara alta. "Incluso, muchos ex legisladores tienen contratos. Es una buena manera de llevarse una jubilación", agregó.
Esposas, maridos y novias son un capítulo aparte. Carlos Reutemann nombró a su mujer, María Verónica Ghio, con el contrato legislativo más alto. Julio Catalán Magni, Gerardo Montenegro, Rubén Giustiniani, Hilda Aguirre y Eduardo Aguilar también comparten trabajo y matrimonio.
Eugenio Nito Artaza trabaja codo a codo con su novia, la vedette María Silvina Scheffler, más conocida como La Profe de Gran Hermano. "Está muchas horas en el despacho. Es una persona de confianza, capacitada, inteligente y con experiencia", explicaron cerca del correntino. Artaza nombró también a su hermana, que hace trabajo social en Corrientes.
Algunas ONG que monitorean la transparencia legislativa cuestionaron estas designaciones. Desde Directorio Legislativo consideraron que "el mecanismo de selección de personal en el Congreso es discrecional y resulta indispensable transparentar el proceso con concursos públicos". Pablo Secchi, director ejecutivo de Poder Ciudadano, también objetó los nombramientos: "La ley no prohíbe estas contrataciones, pero se espera un comportamiento ético de los legisladores. Son pocos los que entienden que están administrando fondos públicos y no una empresa familiar",