La presidenta Cristina Fernández de Kirchner se enfrenta este jueves a un nuevo cacerolazo en contra de su gestión en un marco de crecientes tensiones entre oficialistas y opositores sobre el verdadero alcance y significado de la protesta. En Paraná se realizan concentraciones de personas en la rotonda del Parque Urquiza, frente a la cámara instalada allí por el canal de noticias TN, y en la plaza 1º de Mayo. Estimaciones de última hora señalaban que al menos 2.000 personas se sumaron a la manifestación.

El cacerolazo fue convocado en las redes sociales por argentinos descontentos con el gobierno, con fuerte apoyo de partidos opositores. El 13 de septiembre fue el primero de carácter masivo contra el gobierno en la capital argentina y otras ciudades importantes del país.

En la capital entrerriana, minutos antes de las 20, algunas personas comenzaron a congregarse frente a la Catedral Metropolitana y llegaron a rondar las 500 cabezas. Por falta de organización, otras tantas se hicieron presentes en el Rosedal del Parque Urquiza, y más tarde decidieron encontrarse frente a la Casa de Gobierno, superando las 2.000 personas.

Consignas como "Las cacerolas a las urnas", y "Volvé Néstor, te olvidaste a Cristina" podían leerse en las pancartas de los manifestantes. mencionaron que concurrieron a la manifestación para "que se respete la Constitución", "por lo que está atravesando el país", contra la "corrupción kirchnerista" y porque tienen "miedo" respecto a lo que depare el futuro.