Grandes rendimientos de deportistas, por un lado; diferencias que no se salvan en el ámbito dirigencial, por otro.
Son parte de la realidad del voleibol entrerriano, que aún así lucha por mantenerse en los primeros planos de la geografía nacional. Es que, aunque las voces no sean unívocas, hay proyectos que generan consenso y, con el talento de los deportistas, han posibilitado logros destacables.
No obstante, para algunos dirigentes no es suficiente obtener buenos resultados de los seleccionados provinciales, promocionar jóvenes a los representativos nacionales y presentar dignas participaciones de equipos a escala país. El voleibol provincial puede tener una realidad mejor.
Uno de los que piensa de ese modo es Carlos Becker, el titular de la Federación Entrerriana (FEV) quien, en su primer año al frente de la institución rectora de la disciplina tuvo varias cuestiones que pusieron a prueba su capacidad dirigencial.
EN EL DEBE. Renovando energías en el seno de su hogar de San José en su repaso de lo actuado durante el año que se termina.
“Creo que ha sido un muy buen año en lo deportivo”, se apresuró a destacar el dirigente de la Federación Entrerriana, en un intento por priorizar los aspectos positivos.
No obstante, poco duró la bonanza en su declaración, ya que enseguida debió reconocer que el cansancio “de los integrantes de la mesa ejecutiva de la FEV” se debió al desgaste “para conseguir el transporte que nos llevara a los campeonatos argentinos” y a “la falta de unión” con sus pares.
“A los dirigentes nos está faltando algo de unión, de hablar el mismo idioma y que las asociaciones y clubes resignen alguna cuestión en pos de tirar todos para el mismo lado”, dijo, con firme tono autocrítico.
EN EL HABER. Sobreponiéndose a la temática planteada líneas arriba, el trabajo de los que piensan en el crecimiento general mantuvo al voleibol de Entre Ríos en los sitiales más elevados de la Argentina.
“Mantuvimos los cuatro primeros lugares en los Campeonatos Argentinos, contabilizando todas las categorías, y se volvieron a jugar las Ligas Provinciales en todas las divisiones, sin excepción”, enumeró el titular de la FEV, que asumió en el cargo hace ocho meses.
“En este sentido, este año marcó un crecimiento y trabajamos con el mismo objetivo, que no es menor”, agregó, anticipando su línea de acción para 2013.
Las buenas actuaciones de jugadores, equipos y seleccionados son consecuencia de un buen trabajo de base y Becker lo explicó: “Hay una buena inserción de jugadores a temprana edad. Tenemos un gran trabajo conjunto con la Federación del Voleibol Argentino (Feva), que designó dos entrenadores captadores para la provincia, que permanentemente elevan datos a los seleccionadores nacionales”.
Otro indicador de que se camina por la senda correcta lo dio la realización del Encuentro Provincial de Minivoleibol, “que brindó buenas señales para poder incluir más chicos y que la disciplina pueda crecer más”.
MARCA REGISTRADA. El beach volley (voleibol playero) tiene muchos adeptos en la provincia, gracias al desarrollo impulsado desde la FEV. Su Circuito Provincial es reconocido por la Feva, que cada temporada le otorga más fechas en su calendario.
“Entre Ríos es una plaza que gusta mucho por sus playas y por el entorno que ofrece al jugador. Este verano habrá ocho fechas del Circuito Provincial y algunas de ellas, además, integrarán el Circuito Nacional”, adelantó Becker.
Una última referencia del dirigente fue para el conflicto entre las entidades rectoras del voleibol y las autoridades del Consejo General de Educación. Los jugadores que están federados no pueden participar de los Intercolegiales y viceversa, privando a muchos jóvenes de mejorar su nivel.
“Se está avanzando mucho; aún hay diferencias, pero estamos por el buen camino. Al voleibol le dará un gran empujón sumar a ciudades grandes como Concordia y Concepción del Uruguay”, se esperanzó.
Por último, Becker auguró “crecimiento a toda la familia del deporte y especialmente la del voleibol”.
“Mi deseo y mi gran objetivo es que los dirigentes estemos unidos, porque a veces no estamos a la altura de los jugadores”, cerró.
En la alta competencia
La provincia de Entre Ríos tiene referentes en el mayor nivel competitivo del voleibol.
En la modalidad playera, Ana María Gallay (de Nogoyá, foto) fue una de las dos representantes argentinas en los Juegos Olímpicos Londres 2012 y Luciana Forguez y Gabriela Albano (Paraná) formaron parte del proceso que logró esa plaza para el país.
En la modalidad indoor, se pueden citar los casos de Georgina Pinedo (de Villaguay, capitana de la selección Mayor), Lucía Fresco (de Chajarí, goleadora del mismo combinado), Julieta Puntín (de Cerrito, flamante convocada a las llamadas Panteras) y Agustina Sánchez (de Paraná, preseleccionada para la Sub 23 Albiceleste).
En la rama masculina, Gonzalo Lapera (Paraná) es uno de los brazos fuertes de la selección argentina Sub 23 y ya tuvo su experiencia en torneos continentales con la Mayor.
Además, Julián Álvarez (de Basavilbaso) –seleccionador de la representación de caballeros–, y Rosa Reinoso y Ayelén Enrique (de Paraná) –jugadoras en la de damas–, aportaron para la clasificación argentina a los Mundiales de Menores del año próximo.
En el nivel de conjunto, en el comienzo del año Estudiantes de Paraná sorprendió con su segundo puesto en la Liga Argentina Femenina (LAF), que motivó que cinco de sus integrantes fueran llamadas a la selección argentina. Recientemente, Social y Deportivo San José hizo una primera gran experiencia en la misma competencia, llevando a tie-break a dos de los equipos semifinalistas y dando mucho trabajo a los dos mejores.
En la rama masculina, Patronato de Paraná ocupó el lugar dejado por Pescadores de Gualeguaychú y, con poco tiempo de preparación, fue grata sorpresa en la segunda fase de la Liga A2.