Si se morara en un edificio de propiedad horizontal, es conveniente avisar al administrador del conjunto y, si es posible, indicarle quién tiene llaves de la casa por si se requirieran. Igualmente es importante no dejar llaves en ningún escondite secreto, ni hacer público que se va a ausentar. Sí, se recomienda hablar con algún vecino o la administración para que retiren la correspondencia del casillero y así no dé señales de ausencia.
Se aconseja asimismo informarle al administrador o a un vecino de confianza en qué sitios, hoteles, albergues, se estará alojado y darles los teléfonos para localizarnos. Después, lo usual: no dejar objetos de valor a la vista, asegurarse de cerrar bien puertas y ventanas, desconectar aparatos eléctricos que no se usarán (televisores, radios, reproductora de dvd, etc.); instalar temporizadores para las luces de la casa; dejar el refrigerador en el mínimo de frío para no desperdiciar energía; no dejar mensajes en el contestador del teléfono informando de la ausencia; cerrar la llave del gas, asegurarse de que el piloto del calefón esté apagado por la falta de gas y no porque esté apagado y se registre una pérdida; dejar los papeles importantes bajo llave o de ser posible dejar una copia de los mismos a nuestros familiares; indicar a alguien de confianza sobre la póliza de seguros y qué hacer en caso de algún accidente mayor (a quién avisar, testamento, etc.).

SALUD. El botiquín de viaje es otro asunto considerado menor, sin embargo muchas veces esos primeros auxilios pueden evitar mayores lamentaciones. Debe contener, por supuesto, las medicinas que se toman frecuentemente, suficientes para más días de los que se estará fuera. Si viajan niños, conviene llevar remedios para la fiebre, diarrea o padecimientos que sufran con frecuencia.
Un termómetro oral suele ser de ayuda; lo mismo que gasas, preferentemente no adherentes (al menos 5), alguna solución antiséptica para limpiar heridas; una venda de 5 cm. y una de 10 cm; analgésicos; pomada para heridas leves y golpes; repelente contra insectos; filtro solar y bloqueador; tijeras y pinzas.
Si se cuenta con seguro de gastos médicos, no está de más investigar si la póliza cubre al lugar en el que estaremos. En ese caso, hay que llevar la credencial del seguro e identificación de los asegurados que viajarán.

EQUIPAJE. Una recomendación a tener en cuenta es subir valijas y bolsos al coche una noche antes para procurar que la salida sea lo más discreta posible. Antes que dinero en efectivo, siempre es mejor llevar cheques de viajero o tarjetas de crédito. Si hay que trasladarse al aeropuerto o a la terminal de ómnibus en taxi, es más seguro solicitar el servicio de una empresa reconocida. Y, nunca, abordar autos de alquiler en la calle con valijas y bolsos.
No estará de más identificar el equipaje con alguna seña especial o particular, que esté bien amarrada, dado que pueden existir muchas maletas similares. Finalmente, en el equipaje no guardar dinero o documentos de identificación, que sí pueden llevarse en un bolso de mano o mochila.
Una vez arribado al destino, es mejor conseguir un mapa del lugar, e identificar: a) teléfonos de emergencia; b) hospital cercano; y, c) policía.
Si el lugar al que se llega se hablare un idioma ajeno al nuestro, es recomendable que se sepa cómo pedir ayuda médica al menos. También se sugiere llevar siempre consigo identificación y si correspondiere, identificación del seguro de gastos médicos.

En los hoteles

Si el alojamiento será en hoteles, al registrarse no hay que olvidar tener a la vista el equipaje, distinguir al empleado que transporta los bultos a la habitación, no permitir que lo hagan personas extrañas, depositar objetos de valor y dinero que no va a usar en la caja de depósito del establecimiento.
Luego, al salir de la habitación hay que verificar si fue correctamente cerrada. Nunca se deja la llave sobre el mostrador, sino que se entrega en mano al empleado del hotel.
Es inconveniente dejar objetos de valor o dinero en efectivo en la habitación y si personal de mantenimiento plantea realizar reparaciones (de electricidad, teléfonos, gas, agua, etc.) o servicios (limpieza de ventanas, etc.) y quiere ingresar en la habitación sin que se lo solicite, mejor llamar a la recepción o gerencia del hotel y hacer las consultas del caso.
Ya se sabe, aunque no siempre se respete, que no hay que llevarse de recuerdo objetos de propiedad del hotel (ceniceros, toallas, etc.).
Siempre es prudente consultar el costo de las llamadas por teléfono y el horario de las comidas y desayunos.