Mientras Miriam María José Arroyo, de 39 años, se debate entre la vida y la muerte, internada en el hospital Justo José de Urquiza, la mujer acusada de ser la autora del disparo de escopeta que le causara gravísimas lesiones, fue indagada y se le dictó este martes la prisión preventiva.

Se trata de María Laura Rognoni de 31 años, quien el pasado domingo en horas de la noche, atacara a la víctima frente a un domicilio de calle Eva Perón, entre Lorenzo Sartorio y bulevar Irigoyen, del barrio Cantera 25, a raíz de un problema sentimental-

Cabe recordar que en un primer momento trascendió que la agresora disparó dos veces contra la damnificada, provocándole graves lesiones en el tórax y un brazo, pero según se pudo establecer en los relatos de la Fiscalía durante la audiencia llevada acabo esta martes, Rognoni efectuó un solo disparo contra Arroyo, proyectil de considerable tamaño que ingresó a la altura de la mama derecha, realizando un recorrido interno y provocando graves lesiones en el diafragma, hígado, colon, tórax lado izquierdo, mama izquierda, brazo izquierdo.

Esto le causó gravísimas lesiones que demandaron su inmediato traslado al nosocomio uruguayense, donde se la debió someter a varias intervenciones quirúrgicas, quedando actualmente internada en Terapia Intensiva en estado de como inducido, con respirador artificia y diferentes drenajes, con riesgo de vida.

La mujer acusada de este delito, escapó y se entregó en horas de la madrugada en la comisaría del Menor, quedando alojada en esa dependencia y representada por la defensora oficial, fue llevada para declarar y luego a audiencia donde la Fiscalía pidió la prisión preventiva, bajop la acusación de “Homicidio en grado de tentativa”.

Durante el alegato, el fiscal, doctor Fernando Lombardi, explicó a la jueza de Garantías, doctora Evangelina Bruzzo, que la acusada habría amenazado de muerte a la víctima momentos antes de sacar el arma y disparar prácticamente a quemarropas, lo que demostraba su intencionalidad de dar muerte. También destacó que amenazó e insultó a quienes salieron en auxilio de Arroyo, dejando demostrada su peligrosidad, por lo que consideraba sumamente necesario que Rognoni quedara detenida durante la IPP, ya que podría entorpecer la investigación e influiría en el ánimo de los numerosos testigos en la causa. El fiscal señaló que restan numerosas pruebas para realizar y consideró que dada la pena en expectativa, se debía mantener la prisión preventiva, por lo que solicitó los tres meses de duración de la IPP. Dejando la posibilidad abierta de realizar alguna rueda de personas para agregar mayores elementos a la causa

A su turno, la defensa intentó conseguir la libertad de Rognoni, argumentando que todavía no estaba probado que su defendida hubiera tenido intenciones de dar muerte, agregando además que es madre de siete hijos y que en estos momentos estaría cursando el tercer mes de un embarazo, manifestando entre otras cosas que su encierro sería perjudicial para sus hijos que dadas sus condiciones socio económicas, ya deben afrontar diferentes problemas, argumentando que no existiría riesgo de fuga.

Tras los alegatos, la jueza de Garantías Nº 2, sostuvo que haría logar al pedido de la Fiscalía, dado los elementos que el representante del Ministerio Público había expuesto y que también consideraba que más allá de estar comprobada la materialidad del hecho, habría elementos suficientes para sospechar la responsabilidad. Por esta razón, la doctora Bruzzo dispuso se mantenga la prisión preventiva de María Laura Rognoni por el término de 60 días, ordenando se le practiquen estudios con especialistas y se controle su situación de embarazo.