A través de la resolución Nº 132 de la Secretaría de Ambiente de Entre Ríos se declaró de interés el noveno abrazo al río Uruguay que este año se realizará bajo el lema “Unidos por el agua, por el aire, por la vida”. En ese marco, miembros de la Asamblea Ciudadana Ambiental brindaron ayer una conferencia de prensa en el Salón de los Gobernadores de la Casa Gris para convocar a “los ciudadanos de buena voluntad que quieran acompañar sin banderas partidarias la marcha contra Botnia y por agua y aire saludables”, dijo la integrante de la Asamblea, Cristina Limba. “Entendemos que es una causa justa y hay que reconocer la lucha que viene llevando la Asamblea estos últimos años”, expresó el secretario de Ambiente, Fernando Raffo, y agregó que “la noticia es que estemos hoy después de todo este tiempo y que sea la misma gente la que viene trabajando incansablemente en el reclamo. A veces, con diferencias, pero lo que queda claro es que el reclamo es justo”.

En tanto, desde el Consejo General de Educación (CGE) se declaró a la marcha de interés educativo porque “es un acto de ejercicio democrático y de construcción de ciudadanía que lleva adelante la Asamblea Ciudadana de Gualeguaychú. Por lo tanto, con las instituciones educativas se realizan distintas acciones con la asamblea desde la Coordinación de Educación Ambiental del Consejo”, indicó el vocal del CGE, Héctor de la Fuente.

“Una de las razones por las cuales marchamos es que no sabemos qué tipo de aire respiramos. Lo que sí sabemos es que Botnia está contaminando porque funcionarios de la CARU nos lo han confirmado pero los que lo tienen que decir no lo dicen”, sostuvo Limba y agregó que “le pedimos a las autoridades que se pongan los pantalones largos porque Gualeguaychú no quiere este tipo de emprendimientos y quiere respirar aire limpio”.

Por su parte, el toxicólogo Carlos Goldaracena indicó que “ya nadie duda de que Botnia contamina y Gualeguaychú está esperando los resultados que nos deben. Pedimos el control del agua y del aire que respiramos. Todos los meses tenemos episodios que indican la presencia de sulfhídrico. Lo peor de estos emprendimientos son las emisiones atmosféricas”.
Por su parte, el asambleísta Raúl Almeida dijo que “el pueblo quiere saber de qué se trata” y que “el Uruguay obra de mala fe”. Víctor Limba se refirió al incumplimiento de la promesa de la instalación de sensores para medir el nivel de contaminación del aire.

Carlos Goldaracena dijo: “Estamos muy preocupados porque ya ha habido numerosos incidentes que han pasado en la planta de Botnia o lo hemos observado nosotros directamente como la emisión atmosférica que hubo el año pasado durante 25 minutos, donde Gualeguaychú se cubrió de material particulado con componentes tóxicos”.

Los asambleístas también están inquietos porque les ha llegado la información de que en las piletas de la planta de celulosa se registra el insecticida Endusolfán (que está prohibido en Uruguay) y porque los pescadores se quejan de la muerte de peces.

En la proclama se pedirá por un agua y un aire limpios y por la salud y la vida de la población. “Tenemos apoyo aislado por parte del gobierno argentino. Nosotros queremos saber lo que se nos ha negado permanentemente”, señaló el toxicólogo.