El juez federal Sergio Torres desestimó ayer la denuncia por supuesto enriquecimiento ilícito contra la diputada nacional Elisa Carrió. La legisladora fue acusada por la compra de una parcela de 4240 metros cuadrados en el Club de Campo Chacras de la Cruz –en el norte del Conurbano Bonaerense–, donde está construyendo una casa de unos 300 metros cuadrados. Según el magistrado, Carrió "justificó la evolución patrimonial" para la compra del bien inmueble. Torres sobreseyó a la diputada porque consideró que con ahorro propio y la venta de un departamento porteño ubicado sobre la calle Marcelo T. de Alvear, la fundadora de la Coalición Cívica logró demostrar que poseía el dinero necesario para realizar la operación inmobiliaria. Se basó en las diversas declaraciones juradas patrimoniales presentadas por la legisladora desde 1999 a la fecha así como en la documentación de bienes, créditos y deudas.

Por su parte, el fiscal Carlos Stornelli había considerado el 6 de junio pasado que la acusación era infundada. Así, el juez desestimó la acusación presentada por el abogado Gustavo Ogni, que se había basado en una publicación de la revista Veintitrés. Ogni había denunciado que el sueldo de quien buscará renovar su banca en las próximas elecciones no habría sido suficiente para adquirir la parcela y efectuar la construcción de una vivienda.