Un arranque de furia provocó tensión y preocupación en Basavilbaso: un hombre golpeó a su pareja, la sacó a empujones de la casa que compartían y se atrincheró en una habitación con una beba de siete meses y una carabina calibre 22. El episodio se resolvió después de media hora, cuando la Policía irrumpió violentamente en la vivienda, logró rescatar a la pequeña y detener al agresor.
Era la 1.25 cuando una voz en el teléfono advertía a los policías de guardia en la comisaría que un hombre se había atrincherado en su casa luego de golpear y echar a su pareja. Los efectivos se presentaron inmediatamente en la vivienda de la esquina de Ayacucho y Estrada, en el barrio Oeste, y luego de identificarse como policías, el iracundo les respondió que se fueran y dejaran de molestarlo.
Ante el fracaso de esas primeras gestiones, los policías dieron aviso al fiscal de turno Tomás Rojas, a quien le plantearon además las posibilidades y los riesgos de una irrupción violenta en la casa, con un hombre armado y con una beba de siete meses a su cargo.
Operativo rescate. Alrededor de las 2 la Policía finalmente irrumpió de manera violenta en la vivienda, por una puerta lateral e ingresó al dormitorio donde se encontraba el hombre. Antes de que pudiera reaccionar, uno de los policías se abalanzó para cubrir y rescatar a la beba, que estaba sobre la cama, y otros se abalanzaron contra el agresor, que fue desarmado y detenido.
El hombre fue identificado como Roberto Pivas, un empleado municipal de 27 años y con antecedentes de violencia doméstica, tanto respecto de su pareja como de la nena, de acuerdo a la información brindada por la Policía. “Era violento y agresivo con ambas”, admitió una fuente que pidió reserva.
Luego del operativo, los efectivos policiales constataron que la escopeta que tenía el hombre no tenía poder de fuego porque el cargador ni siquiera estaba en la casa.
Por su parte, el jefe de la comisaría local, José Luis Verbauwede, dijo que “una vez rescatada la nena, fue entregada a su madre y ambas conducidas al hospital para que las revise un médico” y precisó que la mujer, de 20 años, tenía un golpe en el ojo izquierdo.
El jefe policial señaló que “esa misma noche la Policía había concurrido dos veces a la vivienda, por denuncias que habían efectuado los vecinos por ruidos molestos, porque tenían la música fuerte” y que “en la casa había varias personas, como una reunión”.
Pivas fue detenido y trasladado a la Comisaría 1ª de Concepción del Uruguay, donde permanecía hasta anoche. En horas de la madrugada la mujer radicó una denuncia en sede policial y el fiscal Rojas lo acusó por los delitos de tenencia de arma de fuego, amenazas calificadas contra el personal policial y lesiones respecto de su pareja.
La letra de la ley
La Ley Nº 9198 está vigente desde el año 2010 en la provincia de Entre Ríos y establece “toda persona que sufriere daño psíquico o físico, maltrato o abuso por parte de algún integrante del grupo familiar conviviente, podrá denunciar estos hechos en forma verbal o escrita por ante el juez” y define como “grupo familiar conviviente al formado por aquellas personas unidas por lazos de parentesco, sanguíneos o no, aunque provenga de uniones de hecho y que comparten la vivienda en forma permanente o temporaria”. Este caso está comprendido en el último punto. La ley prevé, además, que las denuncias recepcionadas en sede policial deberán ser elevadas a los juzgados competentes en forma inmediata.